El Partido Socialista ha cerrado filas tras la publicación del ‘caso Koldo’. Al mediodía de este miércoles saltaba la noticia de un posible caso de corrupción en el Ministerio de Transportes durante el mandato del diputado José Luis Ábalos: uno de sus asesores de mayor confianza habría obtenido millones de euros en comisiones por la compra de mascarillas ejecutada por el propio Ministerio durante la pandemia. Dirigentes y diputados del PSOE aprovecharon el pleno por la sesión de control al Gobierno para dirigirse al exministro y mostrarle su apoyo entre los pasillos de la Cámara Baja, según ha podido saber Confidencial Digital de fuentes socialistas de primera mano.
“Me he quedado estupefacto (...) Es un golpe (...) Estoy muy decepcionado”, afirmó Ábalos a pregunta de los periodistas en esos mismos corredores donde sus compañeros le trasladaron su respaldo. El exministro aseguró que desconocía esta presunta práctica del que fuera su mano derecha, Koldo García. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha negado de plano que la destitución del extitular de Transportes en 2021 estuviera ligada a las sospechas de este caso. “Cualquier intento de enriquecimiento a través del cobro de comisiones en una tragedia como fue la pandemia cuenta con mi reprobación y reproche”, afirmó el líder del Ejecutivo este miércoles desde Rabat.
El apoyo, en primera instancia, de la cúpula del PSOE a Ábalos ha sido cerrado. El diputado ya no tiene ningún cargo elevado dentro del partido —abandonó la secretaría de Organización también en el verano de 2021— y tan solo mantiene el acta de parlamentario. Además, este presunto caso de comisiones ilegales no afecta directamente al propio Ábalos, como sí sucedió con el caso ‘Tito Berni’, donde el diputado canario apareció en la investigación desde el primer momento.
La investigación de las autoridades detectó un aumento exagerado del patrimonio de García, vinculado a los distintos contratos de mascarillas que se ejecutaron por el Ministerio del que él era asesor. Varios diputados y dirigentes del partido mostraron su respaldo a Ábalos.
Pero Ferraz se mantiene expectante. La noticia ha caído en el partido como un jarro de agua fría y ha causado perplejidad y desconcierto en las filas socialistas. “Estamos sorprendidos”, afirmó el actual Secretario de Organización, Santos Cerdán, este miércoles. “Vamos a ver qué hay de verdad”, apuntillo. Pero en el partido son conscientes de que no se pueden permitir ningún tipo de laxitud con temas de corrupción. La llegada del presidente Sánchez vino de la mano del discurso contra los casos del Partido Popular y fue, precisamente, una sentencia judicial contra los populares la que propició la moción de censura que puso fin al Ejecutivo liderado por Mariano Rajoy.
Las informaciones sobre la investigación acaban de comenzar y en el PSOE tampoco quieren pillarse las manos. De momento, todos los indicios apuntan al exasesor de Ábalos, que no ocupa ningún cargo en el partido y tampoco militancia. Pero Cerdán quiso mostrarse contundente: “El PSOE siempre actúa contra la corrupción cortando por lo sano”.
Aunque fueron muchos los cargos socialistas que quisieron mostrar su apoyo al exministro, el presidente no lo hizo. Nadie de Moncloa ha llamado a Ábalos para comunicarle nada. Este miércoles, Sánchez también acudió al Hemiciclo para presidir la sesión de control, pero como es habitual, se marchó de la Cámara antes de que ElConfidencial.com publicase la primera información sobre el exasesor de Ábalos, por lo que no coincidieron en los pasillos del Congreso.
Tampoco han hablado por teléfono desde el miércoles, según ha podido confirmar ECD de fuentes socialistas de primera mano.
En febrero de 2023, hace justo un año, saltó a las portadas el escándalo del caso ‘Tito Berni’, donde resultada presuntamente implicado un diputado socialista en el Congreso que tuvo que dimitir después de que Cerdán le obligara, como adelantó ECD. El caso se estiró durante los meses posteriores, a pocas semanas de las elecciones autonómicas y municipales. Además, en plena campaña, saltaron varios casos de compra de votos que afectaron, en primera instancia, a los socialistas, y también a Gobierno del PP.
Aunque posteriormente no ha habido mayor responsabilidad penal para cargos del PSOE, aquellos meses dinamitaron la estrategia socialista para encarar la primera vuelta de un combate por hacerse con La Moncloa. Y la izquierda se hundió, perdiendo hasta seis Ejecutivos regionales.
Ahora, el ‘caso Koldo’, inunda de nuevo las portadas y protagoniza los telediarios a dos meses de los comicios vascos —fechados este jueves por el lehendakari, Íñigo Urkullu, para el próximo 21 de abril, como adelantó ECD— y a cuatro de los europeos —se celebrarán el próximo 9 de junio—. Dos citas electorales fundamentales que medirán la fuerza del PSOE en un territorio clave para el buen resultado obtenido en las generales del pasado 23-J y que también se presentará como un plebiscito al Gobierno tras la tramitación de la ley de amnistía que dejará sin efecto todas las causas judiciales relacionadas con el procès independentista.
