Se ha ido Carmen Valero, la mujer que rompió todas las barreras y abrió las puertas al atletismo femenino en los años setenta. En esa sociedad española, oscura y machista, la aragonesa de nacimiento y catalana de adopción fue la primera mujer en el atletismo español en concursar en unos Juegos Olímpicos (Montreal 1976). Campeona del mundo de cross en 1976 y 1977, había sufrido un derrame cerebral en la despedida del año y llevaba unos días en coma. La palabra pionera cobra todo el sentido en Carmen Valero. Una exploradora de nuevas tierras que se encuentra en el mismo pedestal que muchas otras. Lilí Álvarez, dama del tenis de los años 20, primera mujer en España en participar en unos Juegos (París 1924), tres veces finalista de Wimbledon, antes patinadora, alpinista, esquiadora… Noticias Relacionadas estandar No Atletismo Muere Carmen Valero, primera atleta española en competir en unos Juegos Olímpicos J. C. opinion Si vivimos como suizos La reina del cross Rosa Belmonte Blanca Fernández Ochoa, primera española en ganar una medalla olímpica, Juegos de Invierno de Albertville 1992, mujer tenaz en la nieve que impuso su legado en el esquí y desapareció de muerte dulce, a los 56 años, después de unos días desaparecida en la sierra de Madrid. Arantxa Sánchez Vicario, la primera impulsora del «vamos, vamos» ahora tan popular en cualquier deporte y que ella llevó a gala en los duelos épicos con Steffi Graf en Roland Garros (ganó tres) y en otras finales del Grand Slam (perdió dos en Australia y dos en Wimbledon). Amaya Valdemoro, la primera española en llegar a la mejor liga femenina de baloncesto del mundo (la WNBA) y también en ganar ese título. Joane Somarriba fue la pionera del ciclismo, primera española en conquistar una grande del calendario, el Giro de Italia. Después ganó el Tour y fue una de las personas más reivindicativas en la igualdad de género en el deporte. Le gustaba correr Como ellas, Carmen Valero tenía un sueño en el deporte. Le gustaba correr, se lo pedía el cuerpo. Lo hacía en competencia directa con los chicos de la época y contra las directrices sociales que alentaban a las mujeres a sus labores y a tener hijos. Su camino fue una cadena de espinas, según reconoció en una frase que retrata sus andanzas. « Tuve que ganar dos mundiales para dejar de ser invisible». Eran tiempos primitivos, en los que el machismo impregnaba el deporte hasta límites inconcebibles. Según admitió en varias entrevistas la atleta de Castelserás, ellos cobraban un millón de pesetas (6.000 euros) por ganar campeonatos y ella, la única, recibía cien mil pesetas (600 euros). Valero ganó 25 títulos españoles… La atleta, a quien su padre ponía un cascabel en el cuerpo para saber por dónde corría cuando tenía ocho años y se adentraba en las montañas de Cerdañola, se retiró temporalmente con 25 años porque quería cumplir otra ilusión. Ser madre. La Federación Española la ha despedido con todos los honores. «Nuestra pionera. La mujer que abrió camino. La madre de nuestro atletismo. La primera atleta olímpica. Bicampeona del Mundo de cross. La mejor atleta española del siglo XX». Y lo mismo el presidente federativo, Raúl Chapado: «Fue la mujer que transformó nuestra historia. Un talento innato en medio de unas circunstancias imposibles para la mujer».