Territorios Palestinos. El ejército israelí mantiene su ofensiva contra Hamás en la Franja de Gaza con bombardeos nocturnos, señalando que la guerra que inició hace casi tres meses continuará a lo largo de este año.
Este martes, el ejército israelí informó que sus tropas abatieron a “decenas de terroristas” en los últimos días en Gaza, además de descubrir y destruir varias “entradas a túneles”.
A pesar de las llamadas de la comunidad internacional para un cese el fuego, el portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, anunció el lunes que se preparan para “combates prolongados” que se extenderán “a lo largo de este año”.
El conflicto se desató tras un ataque sin precedentes de Hamás en Israel el 7 de octubre, dejando 1.140 muertos. En respuesta, Israel lanzó una potente ofensiva en Gaza, con un saldo de 22.185 muertos, mayormente mujeres, adolescentes y niños, según cifras de Hamás.
En el sur de la Franja de Gaza, se reportaron impactos de misiles en Rafah el martes, y en el norte, se registraron bombardeos cerca del campamento de refugiados de Jabaliya. También hubo combates en Al Maghazi y Bureij, y en la principal ciudad del sur, Jan Yunis, donde el ejército israelí centró sus operaciones.
“Fue el peor año de toda nuestra vida”, expresó Sami Hamouda, habitante de Gaza de 64 años. “Cada día es como el anterior: bombardeos, muerte y masacres”, añadió.
Desde el ataque del 7 de octubre, Israel se comprometió a “aniquilar” a Hamás, considerada “terrorista” por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel. Desde entonces, Gaza enfrenta una grave crisis humanitaria con riesgo de hambruna y la mayoría de los hospitales fuera de servicio.
La ONU estima que un 85% de los 2,4 millones de habitantes de Gaza fueron desplazados, sufriendo escasez de alimentos, agua, carburante y medicinas debido al asedio impuesto por Israel el 9 de octubre.
En Gaza, aún hay 127 rehenes que fueron capturados por Hamás durante su incursión en Israel. El gobierno de Hungría confirmó este lunes la muerte de Ilan Weiss, desaparecido el 7 de octubre en Israel.
En los combates en Gaza, fallecieron 173 soldados israelíes.
El ejército israelí anunció el martes que inició una investigación por las acusaciones de que uno de sus soldados mató a tiros a un palestino detenido en la Franja de Gaza.
Hagari anunció el domingo que algunos reservistas harán una pausa y que el ejército “debe planificar con anticipación”, dado que se prevé que el conflicto se extienda “a lo largo de este año”.
En el norte de Gaza, varios testigos indicaron el lunes a esta agencia que las tropas israelíes abandonaron varias zonas, sugiriendo una reconfiguración del despliegue y no una retirada permanente.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, informó a los habitantes evacuados que “pronto podrán volver a casa”. A pesar de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para el envío “inmediato” y “a gran escala” de ayuda humanitaria para Gaza, los camiones con suministros ingresan con cuenta gotas.
En Rafah, cerca del paso fronterizo con Egipto, Mostafa Shennar, originario de Ciudad de Gaza, describió las condiciones de vida como “desesperantes”.
En Cisjordania ocupada, el conflicto exhacerbó la violencia, con más de 300 palestinos fallecidos desde octubre en redadas del ejército israelí o en ataques de colonos.
Este martes, el ejército israelí llevó a cabo operaciones en Ramala, Jericó y Yenín. Cuatro palestinos murieron en enfrentamientos en Azzun, cerca de Kalkilia, según Wafa, la agencia oficial palestina.
La oenegé israelí Yesh Din señaló que las agresiones de colonos judíos en Cisjordania alcanzaron un récord en 2023.