Diego Alonso está sentenciado. El uruguayo no pasó el examen y el
Sevilla se mete solo en un embrollo de aúpa al quedarse fuera de Europa de la forma más triste. Tras ir ganando con una ventaja cómoda de 2-0, la expulsión de
Ocampos al ver dos amarillas en dos minutos provocó que al equipo andaluz le entrara la nerviosera. El entrenador no supo evitar la sangría y al PSV Eindhoven, hasta entonces fuera del partido, le fue sumamente cómodo empatar y hasta remontar. Tenía un jugador más, pero parecía que jugaba contra 8.
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