Una poderosa erupción solar de clase M9.8 surgía el martes de nuestra estrella, lanzando una llamarada de plasma a altísimas temperaturas, conocida como eyección coronal de masa (CME por sus siglas en inglés), que pronto llegará a la Tierra. No está sola: el día anterior, el Sol produjo múltiples CME algo más pequeñas que también están de camino. Todas ellas, en conjunto, posiblemente formen una tormenta solar 'caníbal' que ocasionen auroras boreales a latitudes más bajas de lo previsto, tal y como informan desde el portal especializado Spaceweather . Las eyecciones coronales de masa se clasifican, según su potencia, con las letras A, B, C, M y, finalmente, X, de más débiles a más fuertes, respectivamente. Después, se establece un número a modo de subclasificación, ya que cada una de las letras es diez veces más potente que la anterior. Así, las de clasificación B serían diez veces más fuertes que las del tipo A; las del tipo C, diez veces más poderosas que las del tipo B; y así sucesivamente. En este caso, los expertos la clasificaron como M9.8, lo que la dejó rozando la mayor potencia posible. Según el Centro de Predicción del Clima Espacial de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), en esta ocasión los efectos de esta CME se sentirán a partir de primera hora del jueves, si bien las últimas erupciones llegarán ya el viernes. La NOAA clasifica las tormentas geomagnéticas en una escala que va desde G1 (que podría provocar un aumento de la actividad auroral alrededor de los polos y pequeñas fluctuaciones en el suministro de energía) hasta G5 (un nivel extremo en el que se pueden dar apagones de radio de alta frecuencia en todo el lado iluminado de la Tierra). En este caso, los expertos señalan que no se producirán fuertes tormentas geomagnéticas: el jueves apenas nos enteraremos, ya que su potencia será de G1. El viernes su poder será algo mayor, llegando hasta el nivel G2. Pero podría elevarse el rango, ya que la CME liberada por la llamarada M9.8 pueda alcanzar a las CME más lentas liberadas el día anterior, lo que resultaría en una 'CME caníbal', desencadenando una tormenta geomagnética de clase G3 aún más fuerte, según Spaceweather.com. Las consecuencias de la tormenta solar caníbal Debido a la magnitud media de estas tormentas solares, solo se espera que las consecuencias se queden en un bonito espectáculo celeste: las auroras boreales (un fenómeno que se produce cuando la magnetosfera se ve perturbada por estas partículas altamente cargadas, que deforman nuestro escudo natural, la atmósfera) se producirán en latitudes medias, saliendo de sus zonas habituales (como los polos, Alaska o el norte de Canadá y Europa). En el pasado, fuertes tormentas solares llegaron a producir auroras boreales que han sido vistas en Madrid; incluso esta pasada primavera se llegaron a registrar desde Extremadura . Este fenómeno es normal en esta época, ya que nos encontramos en un periodo de máximo solar. Las estrellas son enormes bolas de fluido extremadamente caliente, cargadas eléctricamente. Esta carga eléctrica se mueve, generando potentes campos magnéticos. Cada once años más o menos (no siempre es una cifra exacta, cuestión que intriga a los científicos), este campo magnético se 'voltea': los polos norte y sur intercambian posiciones. Y, después de otros once años, vuelven a su lugar. Cada uno es un ciclo y, también en cada uno, se da un máximo y un mínimo solar en los que la actividad de la estrella aumenta y disminuye. Los científicos pueden saber en qué fase se encuentra el Sol debido a la cantidad de manchas que se pueden observar en su superficie. MÁS INFORMACIÓN noticia No Astrónomos españoles descubren un raro sistema estelar con seis planetas en sincronía noticia No Un estudio afirma que estamos maltratando a las abejas melíferas en sus colmenas Y, ahora mismo, nos encontramos cerca del máximo solar de este ciclo, uno especialmente 'movido' a pesar de que los científicos vaticinaron que iba a ser tranquilo. En él hemos visto desde cañones de fuego que se elevan hasta los 20.000 kilómetros de altura a una extraña ' serpiente ' cruzando la superficie del Sol; y no dejan de aparecer noticias en los medios sobre tormentas solares que, como la actual, se acercan a nuestro planeta. Todo, de momento, sin consecuencias para nuestra vida, pero un gran espectáculo para los astrónomos aficionados y una oportunidad única para desentrañar los misterios del Sol.