Actualmente, 20 aplicaciones (app) y programas informáticos desarrollados en Costa Rica, brindan apoyo en la gestión productiva, administrativa y financiera en las fincas ganaderas del país, según un análisis de la Cámara de Tecnologías de Información y Comunicación (Camtic).
El registro de ingresos y gastos, el inventario del ganado, el comportamiento del peso de cada animal, la detección de las épocas de fertilidad, las necesidades nutricionales y de salud, en general, son algunos de los aspectos que son gestionados por medio de la tecnología.
En Costa Rica, el sector de la agrotecnología, conocido como agrotech ha venido creciendo en la última década. En la actualidad, existen más de 100 empresas de este sector, generando más de 1.000 empleos, indica Elizabeth Arroyave, vicepresidenta de Camtic.
Además, se han desarrollado más de 50 aplicaciones o programas de software para el sector ganadero. De estas, alrededor de 20 son utilizadas de manera regular por los ganaderos, agrega Arroyave, con base en información del Ministerio de Agricultura y Ganadería.
A pesar del crecimiento que ha venido mostrando el sector, se enfrentan desafíos, como trámites burocráticos y la necesidad de mejorar la infraestructura de conectividad fuera de las áreas metropolitanas, señala Arroyave quien está a cargo de StockSafe, una aplicación dirigida al monitoreo, control y trazabilidad de animales de cría que se encuentra en proceso de desarrollo.
En Costa Rica,existen un total 662 empresas relacionadas con el sector de tecnologías de información y comunicación que están registradas como pyme ante el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC), el 83% son microempresas; 15%, pequeñas y 3%, medianas. Este registro es un trámite voluntario, aclara la oficina de prensa de la entidad.
Históricamente, las fincas ganaderas llevaban registros en libros físicos, pero la creciente demanda y la necesidad de gestionar grandes volúmenes de datos impulsó la transición hacia soluciones tecnológicas. Una de ellas es GanApp, una aplicación gratuita proporcionada por la Corporación Ganadera (Corfoga).
En el país hay 26.000 fincas que declaran la ganadería como su principal fuente de ingresos y un total de 37.000 que tienen ganado, según los registros de Corfoga, este volumen imposibilita la transmisión de recomendaciones personalizadas o la capacitación en mejoras de gestión y es aquí donde el uso de las tecnologías de gestión y mejora productiva adquieren protagonismo.
Luis Diego Obando, director ejecutivo de la Corporación señala que en julio pasado se puso a disposición la app para dispositivos móviles, desarrollada en Costa Rica. A la fecha lleva 1.010 descargas.
Otra opción disponible es el programa informático Vampp Bovino que funciona desde 1990. Juan José Romero, es parte del equipo desarrollador de este software logrado desde el Centro Regional de Informática para la Producción Animal Sostenible de la Universidad Nacional (UNA) y actualmente preparan una aplicación que tendrá un cobro anual.
Está enfocado en la gestión productiva y administrativa logrando que la información se consolide en bases de datos. A la fecha, la UNA cuenta con registros de 1.800 fincas logrados por este programa. El costo depende de la cantidad de fincas a gestionar por cada licencia y va desde los $700 con un pago adicional cuando se actualiza la versión e incluye soporte técnico, en caso que lo decida el productor.
Hasta este año se han otorgado 1.800 licencias en Costa Rica y más de 300 en Centroamérica y el Caribe, refiere Romero.
También se encuentra la iniciativa InnoBovino, una aplicación desarrollada por emprendedores costarricenses para gestionar finanzas, productividad y ofrecer asesoría personalizada. El inicio fue por medio del acceso a capital semilla y asesoría gestionado por el Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (Catie).
Disponible desde el 2022, el software surgió por la observación de un zootecnista en el sector ganadero donde verificó la ausencia del registro de datos a nivel productivo y administrativo. La aplicación registra las finanzas, la productividad y dispone de herramientas para administrar las fincas, incluidos cursos virtuales y asesoría personalizada.
Es de uso gratuito para fincas pequeñas, para el resto, el acceso es sin costo durante un mes y posteriormente la tarifa anual oscila entre $85 y $145, dependiendo del plan a contratar. La aplicación cuenta con 2.000 descargas, indica Gabriel Orozco, encargado de Comunicación de InnoBovino.
Por su parte, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), está promoviendo el uso de la app Lecheck que ya está disponible en Costa Rica y que fue probada como proyecto piloto en 100 fincas lecheras del país.
El software forma parte del proyecto AgTech para Lechería Climáticamente Inteligente del Fondo Regional de Tecnología Agropecuaria (Fontagro) en el que participa el Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA). La descarga es gratuita e incluye componentes de bienestar animal, informó el MAG, por medio de su oficina de prensa.
Otro ejemplo es Cow Manager, un sistema holandés que utiliza aretes electrónicos para monitorear la salud y fertilidad del ganado. Alejandro Urbina, especialista en Computación, se dedica desde hace 11 años a la ganadería de leche sin experiencia previa y es usuario de este software.
El programa se puede monitorear y gestionar desde larga distancia por medio de una app. Para que funcione el sistema fue necesario instalar routers en la finca ubicada en Tilarán. El hato de esta unidad consta de 250 cabezas raza pardo suizo.
Urbina agrega al desarrollo tecnológico, un robot que alimenta a los terneros entre 10 y 60 días de nacidos. El ternero debe portar un dispositivo que automatiza la actividad del robot y lo alimenta con una repetición de entre nueve y 15 veces al día, este proceso acelera el desarrollo del peso del animal.
Luego de alcanzar más de 100 kilos, una vez concluída la etapa de amamantamiento, las hembras entrarán al proceso de inseminación artificial acortando los tiempos de reproducción convencionales.
Kenneth Solano, especialista en Agronegocios del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), señala que la falta de registros en las fincas impide a los productores tomar las decisiones en los momentos adecuados, de ahí que considera importante el uso de la tecnología en las gestiones, sin embargo, destaca que se hace urgente la capacitación para utilizarla.
Estima que en el sector agropecuario los actores son, principalmente, de generaciones que no están anuentes a los cambios que incorporan tecnología, por lo que recomienda trabajar en el ámbito cultural para cambiar la perspectiva de los productores.
Y es ese relevo generacional con el uso de la tecnología, lo que destaca Rafael Molina, coordinador del Programa de Producción Agropecuaria del Tecnológico de Costa Rica, pues señala que es el motivo para abrir la visión de un entorno productivo más llamativo para los jóvenes.
Por otro lado, asegura que la tecnología le garantiza una nueva dimensión a la actividad agropecuaria al transformar al productor en un gerente, además que desarrolla eficiencia operativa.
“Hay que dar estos pasos si no nos quedamos atrás, es parte de mejorar la competitividad”, concluye Luis Diego Obando, de Corfoga.
