El Ayuntamiento de Badalona, en manos del PP de Xavier García Albiol, ha protagonizado una nueva polémica al haber retirado unas ayudas que otorgan trabajo a personas migrantes para que puedan regularizar su situación administrativa.
Estas ayudas, que provienen de los fondos europeos, empleaban a 14 personas en Badalona, la mayoría de ellas supervivientes del incendio que en 2020 arrasó una nave en la que vivían personas migradas y en el que murieron 3 personas.
La oposición ha tildado esta decisión de racista y apuntan que se equipara a las políticas “de extrema derecha que vemos en Europa”, en palabras de la concejala de Guanyem y exalcaldesa Dolors Sabater. En respuesta a estas acusaciones, la concejala de comercio del consistorio, Rosa Bertran, ha defendido que ella no es racista: “En casa hemos tenido negocios toda la vida y teníamos negros cuando todavía no había, como quien dice”.
Estas declaraciones se han dado en el programa 'BDN360' de la televisión de la ciudad, en pleno debate sobre la polémica retirada de estas ayudas, que ha sido denunciada por Cáritas y por otras entidades y partidos de la oposición.
En su defensa, Bertran ha asegurado que la decisión se ha tomado para “no discriminar a los vecinos de Badalona. Todos tienen derecho a un trabajo y, para nosotros, son prioritarias las personas que son de la ciudad y viven en la ciudad”. Ante estas declaraciones, Sabater ha respondido que las personas migradas, no por ser irregulares, dejan de ser vecinas de Badalona. A lo que Bertán ha asegurado: “nosotros lo vemos diferente”.
Según la concejala de comercio, “no se puede permitir” que las personas extranjeras “quiten” el trabajo a los nacidos en la ciudad pero, a su vez, considera necesario que los recién llegados puedan obtener un permiso de trabajo con más facilidad, ya que “faltan trabajadores”. Eso sí, el permiso debe estar vinculado a requisitos como que se tengan ganas de trabajar y no se haya delinquido.
