La plata obtenida por Maylín del Toro en los 63 kilogramos (kg) el pasado viernes significó lo más relevante del paso cubano por el Grand Slam de Tel Aviv que tuvo asiento en la capital israelí durante el fin de semana y representó el segundo reto de peso para el judo cubano en esta incipiente temporada de 2023. Con dicho podio y otras actuaciones de mérito la imagen ofrecida por nuestros principales exponentes, por ahora, invita al optimismo.
Ayer otro de los estandartes de esta disciplina en la Isla, Iván Silva (90 kg), concluyó en el quinto escaño, que sumado al tercero de hace par de semanas en París corroboran el buen momento físico y técnico que atraviesa el matancero, en la élite de dos certámenes fortísimos y en una de las divisiones más parejas del judo mundial.
Este sábado, además del resultado de Silva, la multilaureada artemiseña Idalys Ortiz debutó en esta campaña con un séptimo puesto que deberá ir superando poco a poco a medida que vaya acoplándose a la rutina competitiva. De hecho, en Tel Aviv tuvo la posibilidad de batallar por una medalla en la fase de repesca, mas no se presentó debido a una indisposición.
Los retos más significativos en 2023 para ella, así como para el resto de los judocas criollos, serán el Mundial de Doha, Catar, en mayo, y los juegos múltiples regionales.
Por ende, resulta de vital importancia esta fase de preparación con asistencia a certámenes de nivel, en los cuales Julio Alderete, entrenador de la escuadra masculina, y Yordanis Arencibia, su homólogo en el femenino, han incluso rotado a los atletas más jóvenes para foguearlos a todos de cara a la fase más compleja del calendario.
En Tel Aviv, Francia quedó en el escalón más elevado del medallero con tres preseas de oro, mientras Canadá y Georgia obtuvieron dos. Por su parte, Israel, Azerbaiyán, Italia, Mongolia, Gran Bretaña y Suiza concluyeron con una. Cuba terminó en un meritorio lugar 14, gracias a la plata de Del Toro.
A propósito de la ruta del judo criollo este año, la página oficial de la Federación Internacional de este deporte refiere la realización en abril venidero de un Abierto Panamericano en Varadero, el cual sucederá los días 8 y 9 de ese mes y significará el regreso de torneos internacionales a nuestro país, pocos años después de los Grand Prix que tuvieron lugar en el Coliseo de la Ciudad Deportiva habanero.