La primera de las dos mujeres que pueden sacarle los colores a Pedro Sánchez en la UE es polaca y absolutamente desconocida para el gran público. Se llama Joanna Krzeminska y dirige una de las cuatro divisiones de la Oficina Europea Anti Fraude (OLAF). Concretamente, la encargada de identificar quién malgasta el dinero público comunitario. La segunda mujer era completamente anónima para los españoles hasta el pasado otoño. Incluso en las filas del propio Gobierno, pocos conocían la identidad y el rostro de Monika Hohlmeier, actual presidenta de la Comisión de Control Presupue ...