Los gritos y la emoción en la casa de Alejandro Jiménez y Ana María Rodríguez, padres del boxeador David Medallita Jiménez, alegró este sábado el ambiente del Proyecto Manuel de Jesús Jiménez en Cartago.
Don Alejandro y doña Ana María recibieron en la sala de su casa a su hija Asly Paola, a su cuñado Freizer Torres Piedra, sus nietos Deilan y Dylan y al padrino de Medallita Guido Alberto Rodríguez Rodríguez, quienes vivieron con intensidad los 12 asaltos de la pelea donde Medallita no pudo coronarse campeón del mundo, al caer por decisión unánime ante el ucraniano Artem Dalakian.
Una y otra vez la familia alentó a David y reprochó la actitud del pugilista ucraniano, quien usaba todas sus armas para evitar los golpes del tico. La familia tampoco estuvo de acuerdo con las decisiones del árbitro inglés Michael Alexander, pues comentaron que favorecieron a su adversario, en especial la hermana, quien estaba furiosa por su actuación.
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Asly Jiménez, hermana de Medallita, repetía “¡Vamos, vamos. Está cansado, vea lo agarra demasiado, ese árbitro no hace nada. Tome, tome (gritaba con cada golpe que acertaba su hermano). A ese mae lo salvó ese árbitro y que metía mucho el brazo”, añadió la joven cuando concluyó la pelea.
Por su parte Ana María, la madre, no se quedó quedita. Se levantó de su asiento, salió de la casa y se fue a la cocina. En el noveno episodio se sirvió una taza de café, en la que ella llamó la taza de la suerte, que tiene una fotografía de Medallita con sus papás.
“Quíteselo papá. Dele David, dele que está cansado”, repetía constantemente la señora que disimulaba su nerviosismo estando de pie y aplaudiendo.
“La pelea estuvo buenísima. Lo único fue que este contrincante agarraba mucho. Pero lo bueno de Medallita fue que aguantó los 12 rounds y salió bien gracias a Dios. No tuvo lesiones graves, por lo que le agradezco a la Virgencita de Los Ángeles”comentó Rodríguez.
Por su parte, Alejandro, el papá de Medallita, en todo momento grabó cada uno de los rounds con su celular, para comentarlo después con su hijo, mientras su compadre y cuñado, Guido Rodríguez, estaba sumamente nervioso, observando el combate sentado en una silla, pero inquieto por cómo llevaba la pelea el rival de su ahijado.
“La pelea estuvo fuerte. Lastimosamente el réferi no ayudó en faltas del contrincante. Gracias a Dios todo salió bien, mi hijo la pulseó como tenía que ser. David aguantó los 12 rounds, trató de entrar en la pelea pero Dalakian no lo dejaba Fue una buena pelea”, declaró Jiménez.
