Hace ya al menos una década se viene pronosticando el tantas veces decretado apagado de la televisión y su reemplazo por el consumo de plataformas de contenidos on demand, redes sociales y, en la franja etaria más joven, el novedoso mundo del streaming. Por un lado, la sostenida baja en las mediciones de los ratings abona esa teoría: programas que hagan 30 o 35 puntos de rating, habituales de ver hace unos 15 años, hoy parecen ciencia ficción. Sin embargo, esta tendencia se suspende frente a ciertos eventos que revitalizan la función de la televisión: indudablemente, uno de ellos es el Mundial, un mes en el que los índices de encendido vuelven a volar por los aires. Durante el evento, en hogares, bares e incluso oficinas siempre hubo un partido de fútbol de fondo, o, en su defecto, un móvil desde Qatar.
Para el Mundial, las señales de televisión apostaron fuertemente por coberturas casi ininterrumpidas, con el envío de extensos equipos periodísticos y técnicos a la onerosa Qatar. Una de las producciones de mayor despliegue fue la de la operadora de televisión satelital DirecTV, que, a través de una señal propia, asumió el desafío de transmitir en vivo los 64 partidos del Mundial... desde una señal que se emite exclusivamente para abonados al servicio de DirecTV.
Esta apuesta de DirecTV confirma su estrategia de trascender la mera oferta del servicio de televisión satelital para, además, posicionarse como productora de contenidos propios. Este modelo de negocios se acentuó desde que DirecTV está en manos del Grupo Werthein, que se la adquirió a la gigante norteamericana AT&T a mediados de 2021. El Grupo concretó la compra a un precio bajo (unos 500 millones de dólares) porque a AT&T le estaba resultando más un problema que un negocio. El grupo entendió que, para que DirecTV creciera, debía ampliar sus horizontes.
En este año y medio, además de la cobertura del Mundial, el principal hito fue el lanzamiento de DNews, una señal de noticias emitida en Argentina, Chile, Colombia, Perú, Ecuador y Uruguay. Cada país cuenta con equipos de producción y periodísticos propios. El objetivo de la empresa es ampliar las fronteras de DNews, y llevarlo a aún más países. Además de emitir contenidos propios, DNews también tiene alianzas para la transmisión de documentales con dos de los grandes medios públicos europeos: la británica BBC y la alemana Deutsche Welle (DW).
En medio de estos desafíos, DirecTV también ha debido enfrentar ciertos contratiempos. Uno de ellos se produjo a fines del año pasado, cuando el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) publicó los llamados Pandora Papers, un registro de empresas offshore formadas por grandes empresarios y políticos de todo el mundo. Entre otros empresarios argentinos, apareció el nombre de uno de los directivos del Grupo (Adrián Werthein), clave en el proceso de adquisición de DirecTV, como integrante de tres firmas (Ducal Investment, Carnol Overseas y Hinslet) con sede en las Islas Vírgenes.
Otro de los conflictos que DirecTV no supo esquivar en los últimos tiempos fue uno que suele perjudicar a las grandes empresas de telecomunicaciones con millones de abonados. Se trata de las constantes denuncias y sanciones por la deficiente calidad del servicio o por relaciones problemáticas con los clientes. En agosto de este año, por citar un caso, la Secretaría de Comercio, a través de Defensa del Consumidor, aplicó a DirecTV una multa millonaria por no tener publicados en su web los botones de arrepentimiento y de solicitud de baja, lo que constituye una maniobra para dificultar la rescisión del servicio.
Además, la empresa registra sanciones de organismos provinciales de Defensa del Consumidor, como por ejemplo la dependencia mendocina, que a fines de agosto del corriente año, ordenó a DirecTV una indemnización a un cliente al le había aplicado aumentos injustificados en su factura.
Una polémica que excede las fronteras argentinas y que también salpica a la empresa surge por la cuestión de la exclusividad de ciertos contenidos. Los cableoperadores peruanos pusieron el grito en el cielo porque sólo los abonados a DirecTV tenían acceso a la transmisión en directo de los 64 partidos del Mundial. Los otros operadores pueden transmitir tan sólo 32 partidos en directo, y la mitad restante en diferido. Por este motivo, denunciaron una situación anticompetitiva. Además, cuestionaron que la app de DirecTV falló en la inauguración del Mundial. Una situación similar se dio el año pasado, en el marco de la Copa América. En ese entonces, DirecTV, en un arreglo con Torneos, le puso un "cepo" a la transmisión en Argentina a 9 de los 28 partidos, que sólo podían ser vistos por abonados al servicio de su empresa, que alcanzan sólo un 35% del mercado.
De todas formas, el rumbo de DirecTV parece claro: afianzarse como operadora y, simultáneamente, como productora de contenidos. Uno de los objetivos, según sus directivos, es que DNews, su señal de noticias, transmita las 24 horas y se instale sólidamente en el rubro.