La Policía Nacional, en colaboración con el FBI, US Marshals y la OCN INTERPOL Madrid, han detenido a uno de los criminales incluidos en la lista de los diez fugitivos más buscados del FBI, Michael James Pratt.
Se trata de un neozelandés que está condenado a cadena perpetua en Estados Unidos por delitos de pornografía infantil, explotación sexual, agresión sexual y ganancias ilícitas de más de 17 millones de dólares.
Se dedicaba a la producción audiovisual de pornografía y reclutaba mediante engaños a menores y mujeres de corta edad procedentes de Estaso Unidos y Canadá. Publicaba anuncios en Internet en los que se ofrecían supuestos trabajos de modelo que finalmente resultaban ser grabaciones pornográficas. También usaba a otras mujeres a las que pagaba y utilizaba como "cebo" para convencer a las víctimas de que el material nunca sería publicado, además de retenerlas y obligarlas a realizar prácticas sexuales a las que ellas se habían negado de manera expresa.
Según testimonios de las propias víctimas, en ocasiones eran retenidas en contra de su voluntad en los lugares de grabación, y no se les permitía abandonarlo hasta que hubiesen cumplido las pretensiones exigidas por la productora propiedad del prófugo.
Se trata de la primera detención en España de uno de los delincuentes incluidos en la lista Ten Most Wanted Fugitives del FBI. Hasta el momento, más allá de las fronteras de los Estados Unidos tan solo se ha capturado a 57 de estos prófugos.
La búsqueda internacional de Michael James Pratt comenzó con su fuga de los Estados Unidos de América tras ser condenado a cadena perpetua. El proceso judicial se centró en hechos relativos a la realización de producciones audiovisuales de contenido pornográfico entre los años 2012 y 2019.