Daniel Ricciardo estará por primera vez fuera de la parrilla de
Fórmula 1 desde su debut en el GP de Gran Bretaña de 2011 a bordo de
HRT. El australiano se quedó sin asiento después de dos años realmente malos en
McLaren que han acabado minando la sonrisa del paddock.
Red Bull, equipo del que se fue para no estar a la sombra de
Verstappen, le ha dado una oportunidad de seguir ligado al Gran Circo como piloto de pruebas. Pero el objetivo de Ricciardo no es otro que tener un volante como piloto oficial y para ello se fija en figuras como la de
Fernando Alonso.
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