22% de menores de esta edad todavía no arrancan esquema de protección. CCSS lanza llamado a padres de familia a acudir sin temor a los vacunatorios
Un vehemente llamado lanzó la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) a los padres de 116.355 niños de entre 5 y 11 años que no han recibido ni la primera dosis contra la covid-19. Las autoridades instan a los adultos a no tener miedo de llevar a sus hijos a los vacunatorios, pues aseguran que allí nadie los juzgará por no haber ido antes.
Entre esas edades, la cantidad de menores que todavía no arrancan su esquema de protección representa el 22,14% de la población. En este segmento, la inoculación marcha más lento, pero no se ha detenido del todo. De hecho, en la semana comprendida entre el 18 y 24 de octubre, se comenzaron 1.858 esquemas.
Leandra Abarca, coordinadora del Programa Ampliado de Inmunizaciones de la CCSS, invitó a las familias a llevar a sus pequeños a recibir la inyección. El esquema se compone de tres dosis. La segunda se aplica 21 días después de la primera y la tercera, cinco meses después. La ubicación y los horarios de los puestos de vacunación pueden revisarse en www.ccss.sa.cr
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A los niños aún no vacunados se les deben sumar 194.790 mayores de 12 años o más que no han iniciado su vacunación. Ellos representan el 4,56% de este rango etario. En la última semana, 1.020 adolescentes y adultos obtuvieron su primera dosis.
En estas edades, la vacuna también consta de tres dosis. Las primeras dos se ponen también con tres semanas de diferencia, pero la tercera se coloca cuatro meses después de la segunda.
La población con mayor rezago es la que está en el rango de entre 6 meses y 4 años con 11 meses, pues falta inocular a 286.379 menores, el 89,3% del total. Este grupo va más lento porque la vacunación comenzó más tardíamente, el pasado 3 de octubre. En los primeros 20 días, se pusieron primeras dosis a 41.648 menores (el 12,7%).
Para ellos, el fármaco también consta de tres inyecciones. Las primeras dos también se colocan con una diferencia de tres semanas; el cambio se da en la tercera dosis, que se coloca ocho semanas después de la segunda.
Los vacunatorios también están dispuestos para que las personas reciban su segunda y tercera dosis, según corresponda. Abarca aseguró que no se juzgará a las personas por no tomar antes su decisión de comenzar o completar sus dosis, y más bien serán recibidos con la información que requieran para aclarar sus dudas.
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