Los movimientos en las bandas delatan que la Real terminó la pasada temporada convencida de que se necesitaba un cambio radical en el puesto. Se anunció el adiós de <b>Januzaj </b>prácticamente en cuanto terminó el último partido y a <b>Portu </b>se le han dado toda clase de facilidades para que se busque la vida. Al belga le dejó claro <b>Imanol </b>que no entraba en sus planes. La reestructuración ha ido cogiendo forma mientras <b>Oyarzabal </b>y <b>Barrenetxea </b>se recuperan de sus graves lesiones. Queda de manifiesto que los extremos eran ‘carne de cañón’ de antemano. El tempranero fichaje de <b>Cho </b>fue otra pista sobre los planes que ha podido urdir el club desde meses atrás y la llegada de <b>Brais </b>confirma que existe un salto cualitativo. Tiene 25 años, es un buen futbolista y compatible con cualquiera de los atacantes que el entrenador tendrá a su disposición a lo largo de la temporada. Es una de las razones que hacen fortalecer las positivas vibraciones que transmite la Real. Hoy se pone en marcha una nueva singladura y no hay motivos para pensar en que el bienestar deportivo, económico y social tenga fecha de caducidad. De momento, a los técnicos no parece quitarles el sueño que haya un delantero menos con respecto a la anterior plantilla y que se queden los que están. Repasando la asignatura pendiente del gol, que por momentos complicó la vida a la Real, la postura sugiere alguna duda. Habrá que comprobar el estado físico de <b>Carlos Fernández</b>, mientras <b>Karrikaburu </b>se foguea, para ver quién hace compañía a <b>Isak</b>.
Los movimientos en las bandas delatan que la Real terminó la pasada temporada convencida de que se necesitaba un cambio radical en el puesto. Se anunció el adiós de Januzaj prácticamente en cuanto terminó el último partido y a Portu se le han dado toda clase de facilidades para que se busque la vida. Al belga le dejó claro Imanol que no entraba en sus planes. La reestructuración ha ido cogiendo forma mientras Oyarzabal y Barrenetxea se recuperan de sus graves lesiones. Queda de manifiesto que los extremos eran ‘carne de cañón’ de antemano. El tempranero fichaje de Cho fue otra pista sobre los planes que ha podido urdir el club desde meses atrás y la llegada de Brais confirma que existe un salto cualitativo. Tiene 25 años, es un buen futbolista y compatible con cualquiera de los atacantes que el entrenador tendrá a su disposición a lo largo de la temporada. Es una de las razones que hacen fortalecer las positivas vibraciones que transmite la Real. Hoy se pone en marcha una nueva singladura y no hay motivos para pensar en que el bienestar deportivo, económico y social tenga fecha de caducidad. De momento, a los técnicos no parece quitarles el sueño que haya un delantero menos con respecto a la anterior plantilla y que se queden los que están. Repasando la asignatura pendiente del gol, que por momentos complicó la vida a la Real, la postura sugiere alguna duda. Habrá que comprobar el estado físico de Carlos Fernández, mientras Karrikaburu se foguea, para ver quién hace compañía a Isak.