Argelia ha decidido proceder a la suspensión «inmediata» del Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación con España, según informó este miércoles un comunicado de la Presidencia de la República e hizo pública la agencia de noticias estatal argelina.
«Las autoridades españolas han realizado una campaña para justificar la posición que han adoptado sobre el Sahara Occidental en violación de sus obligaciones jurídicas, morales y políticas como potencia administradora del territorio que pesan sobre el Reino de España hasta que finalice la descolonización del Sahara Occidental», precisó el comunicado.
El Ministerio de Exteriores de España ha lamentado este anuncio y a través de un comunciado, «reafirma su compromiso pleno con el contenido del Tratado y los principios». «El Gobierno de España considera a Argelia un país vecino y amigo y reitera su plena disponibilidad para seguir manteniendo y desarrollando las especiales relaciones de cooperación entre los dos países, en beneficio de ambos pueblos», dicen desde Exteriores
España y Argelia firmaron en 2002 este tratado durante la visita de Estado que el presidente Abdelaziz Buteflika realizó ese año.
Este nuevo gesto de Argel se suma a la llamada a consultas del embajadora argelino en España hace unos meses. El pasado 19 de marzo y tras el anuncio del cambio de posición del Gobierno de Pedro Sánchez sobre la cuestión del Sahara Occidental, Argel llamó a consultas a su embajador en Madrid, Said Moussi.
El propio Pedro Sánchez, a través de una carta dirigida al rey marroquí Mohamed VI dio un volantazo de 180 grados y tomó partido por Marruecos en la cuestión de la excolonia, aceptando la propuesta marroquí sobre la autonomía. Este giro le sirvió a Sánchez para poner fin al conflicto diplomático con el reino alauita, abierto desde mayo del año pasado tras la entrada encubierta del líder del Frente Polisario, Brahim Gali, pero abrió una nueva brecha con un país vecino en el Norte de África.
«Sorprendidas por este repentino cambio de posición de la antigua potencia administradora del Sáhara Occidental, las autoridades argelinas han decidido llamar a consultas a su embajador en Madrid con efecto inmediato», señalaba un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores de Argel.
Varias han sido las amenazas que Argelia ha hecho a España, sobre todo en el tema gasístico. Las últimas presiones han sido intentar romper los contratos de suministro de gas si el Ejecutivo de Pedro Sánchez permite a Marruecos utilizar el gasoducto del Magreb que fue cerrado por aquel país en octubre del año pasado. Argel es el segundo proveedor de gas a España, solo por detrás de Estados Unidos.
