Rosa, una enfermera con más de dos décadas de servicio, es una institución en Chozas de Canales, una población toledana de unos 4.000 habitantes. Pero este lunes ha vivido, seguramente, una de sus peores experiencias profesionales. Ha sido víctima de una agresión en una vivienda cuando atendía a un paciente sobre la una de la tarde. Ha tenido que ser trasladada en una ambulancia al Hospital Universitario de Toledo.
Ha sucedido en el número 72 de la calle Sevilla, a diez minutos andando del consultorio médico, situado en el número 4 de la calle Austria. Rosa «estaba curando al enfermo, ha llegado de la calle un hermano con un cuchillo y la ha agredido», según ha relatado a'ABC' el alcalde, Antonio Antúnez.
Como testigo, una trabajadora de ayuda a domicilio que acompañaba a esta enfermera del consultorio médico, aunque no ha sido agredida. Esta empleada, «con un ataque de nervios por lo que ha vivido» según el alcalde, le ha contado que el agresor, de nacionalidad marroquí, había cortado a Rosa en la cara, a la altura de un ojo. «La enfermera ya había tenido que ir más veces a atender a este enfermo porque está en la cama», ha añadido el edil.
«Creq que es la primera vez que le sucede algo así al personal del consultorio médico», asegura el alcalde, quien desconoce si el agresor ha sido detenido.
