La antepen?ltima ley de Greene y una antes que esta hablan de mostrarse un poco vulnerable y de hacer cambios someros, respectivamente.
El experto en mostrar su imperfecci?n es el propio Ya Sabes Qui?n, tanto as? que es capaz de hacer y decir en una sola ma?anera todo lo que se le reproch? a sus ?ltimos diez antecesores durante m?s de medio siglo.
Lo mismo nacionaliza, centraliza, monopoliza, llora, pontifica, descalifica, se equivoca, patina y despierta el humor involuntario y la pol?mica como nunca so?aron Fox con ?Borgues? y sus famosas lavadoras de dos patas; D?az Ordaz asumiendo ?toda la responsabilidad? que la sangre que sus manos delataban un inolvidable 2 de Octubre; Jolopo y su perruna defensa del peso; y los aplausos que le negaron a Pe?a Nieto cuatro veces, no, menos, cinco.
Esta y no otra es la mayor habilidad L?pez Obrador, la naturalidad, vulnerabilidad y cierta ingenuidad con la que se presenta todos los d?as a hablar con su p?blico, a quien, a dem?s de decirle lo que quiere escuchar, hace re?r, llorar, desvariar y hasta encabronar cont?ndole las fechor?as que sus adversarios, los traidores a la patria, cometen todos los d?as.
Fiel disc?pulo de Greene y sus teor?as, el presidente de M?xico anuncia su gran transformaci?n y termina por no trasformar mucho. Su equipo est? plagado de los mismos a los que antes dec?a combatir. Se queja de la pol?tica econ?mica internacional pero se muestra disciplinado con lo que dicta el neoliberalismo en materia monetaria, al son que le dicta el Banco Mundial, contradici?ndolo solo de dientes para afuera. Amenaz? con retirar al Ej?rcito de las calles y termin? por aumentar su presencia, aunque no su eficiencia.
En fin, AMLO no es perfecto y lo sabe, por eso se muestra lo m?s imperfecto posible para que sus fans le perdonen absolutamente todo, como a Bad Bunny se le perdonan su mala dicci?n, lo absurdo de sus letras, y la obscenidad de su voz.
Sus cambios son verdaderas revoluciones que regresan al punto donde empezaron.
Todo esto obedece al gusto de un p?blico que exige cada vez menos sofisticaci?n y complejidad.
La masa ama lo ordinario y desprecia lo extraordinario. As? de f?cil.
De tarea
En Aguascalientes, la contienda sube de tono. Morena invade el peque?o estado con tropas provenientes de todos los rincones del pa?s y con todo tipo de usos y costumbres a los que las y los hidroc?lidos no est?n nada acostumbrados.
En cuanto a los naranjas, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, flaco favor le hace a la candidata de su partido en dicha entidad, diciendo en un video que ?su esfuerzo habr? valido la pena?. ?Vaya palabras de aliento!
La panista Tere J?menez, fuerte y sin confiarse.
La del PT-Verde no pinta y la de Fuerza por M?xico salt? al ruedo cual gallo giro, ?volando al ras del suelo y sin darle tiempo a don Luis Soltar?, dijera nuestro querido Chente, ahora en el cielo de los charros.
Fin de curso
La pr?xima semana har? mi ?ltima entrega de esta serie de 48 Lecciones sobre elecciones, basada en el best seller de Robert Greene: Las 48 Leyes del Poder.
El 6 de junio publicar? mi tradicional an?lisis sobre el proceso electoral del a?o.
Marco Sifuentes
