En las comunidades autónomas donde existen varias lenguas cooficiales, los ciudadanos tienen derecho a dirigirse a la administración en cualquiera de esos idiomas. El Gobierno vasco aprobó en 1982 la Ley de Normalización Lingüística con el objetivo de garantizar que en las plazas de funcionario se garantizara un mínimo conocimiento del euskera. Así surgieron lo que hoy se conoce como perfiles lingüísticos, con hasta cuatro niveles, que según la ley pueden ser requisito imprescindible en entre el 51% y el 52% de las plazas públicas ofertadas en una oposición. El problema, aseguran varias fuentes consultadas, es que en muchas de las últimas convocatorias públicas se ha exigido un título de euskera en hasta el 70% de las plazas ofertadas.... Ver Más