De las alrededor de 700 quejas recibidas por Activision Blizzard, la compañía ha tomado la decisión de despedir a 37 personas y amonestar a otros 44 empleados.
Activision Blizzard ha despedido a un total de 37 personas denunciadas por sus propios compañeros de trabajo por "mala conducta" en el entorno laboral. Esta es una de las consecuencias que ha tenido la
investigación que la compañía de
Bobby Kotick inició después de que salieran a la luz
múltiples casos de acoso, vejación y machismo en los estudios responsables de sagas como
Call of Duty o
World of Warcraft, algo que ha llevado al gobierno de Estados Unidos a poner la lupa
tanto en el CEO como
en la propia empresa.
Según afirman en
The Wall Street Journal, desde que se hicieron públicos los casos de acoso en Activision Blizzard la compañía ha recibido alrededor de
700 quejas por mala conducta de ciertos empleados; de todas estas, el comité habría revisado ya el 90%. Como resultado de esta investigación interna, Activision Blizzard afirma que 37 personas han "salido" de la compañía, mientras que
otras 44 han recibido sanciones por acoso sexual y otras malas prácticas en el entorno laboral.
En ese mismo medio afirman que Bobby Kotick, quien
habría estado al tanto de la mayoría de estos casos,
paralizó la presentación de un informe con las cifras de esta investigación por considerarlas mucho peores de lo que parecía en un principio. Lo último que supimos, en octubre del año pasado, es que
Activision Blizzard despidió a 20 empleados por este motivo.
Más consecuencias para Activision Blizzard
Estas
no son las únicas consecuencias a las que ha tenido que enfrentarse la compañía de Bobby Kotick tras la publicación de sus casos de acoso: a nivel bursátil Activision Blizzard
ha visto desplomarse sus acciones tras el escándalo, mientras que su imagen pública se ha visto reducida hasta el punto de haber sido
apartados de la gala de The Game Awards 2021, e incluso con compañías como Xbox reconociendo que desde entonces
ha cambiado su relación con esta firma y Nintendo calificando como
"perturbadoras" estas acusaciones.