Hay quien todavía confunde la sanidad pública con la Salud Pública, y eso que estos últimos dos años hemos tenido tiempo de sobra para aprender a diferenciarlos. Los especialistas en Salud Pública han copado horas y horas en el prime time, e incluso han ocupado el lugar otrora destinado a tertulianos y todólogos. Son los principales responsables de vigilar, controlar, reportar y tomar decisiones sobre la marcha de la pandemia, la mayor amenaza a la salud pública de los últimos años. A pesar de su recobrada importancia, el Ministerio de Sanidad ha invertido dos millones de euros menos en ellos este año en comparación con 2020.
Así se desprende de los documentos de ejecución de gasto elaborado por la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) consultados por Vozpópuli. En el mes de noviembre de 2020, el Gobierno había gastado 22,4 millones de euros en el apartado 'Salud Pública, Sanidad Exterior y Calidad'. De esta financiación dependen el Centro de Control de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes) de Fernando Simón, o los equipos de Sanidad Exterior, aquellos encargados de velar por que el virus no traspase nuestras fronteras.
En cambio, para noviembre de 2021, la inversión realizada por el Ministerio de Sanidad en dicha materia es de 19,9 millones de euros, un gasto inferior a pesar de la importancia de estos equipos. Fuentes de la Dirección General de Salud Pública confirman a este diario los mermados recursos con los que cuentan. Antes de la pandemia, el Ccaes de Fernando Simón contaba con apenas 5 trabajadores. La llegada de la covid ha hecho que crezca a alrededor de 15.
La Sanidad Exterior también se ha visto desbordada en múltiples ocasiones a lo largo de 2021. Bajo su responsabilidad estaba la vigilancia de la entrada de casos positivos por mar y aire, la gestión de los centros de vacunación internacional y la administración de vacunas contra la covid. Se trata de equipos mermados donde es muy difícil reponer las bajas dadas las poco atractivas condiciones salariales.
Eso sí, los fondos europeos han permitido al Ejecutivo regar con 13 millones de euros a las comunidades autónomas para financiar el nuevo sistema de información de la red de vigilancia de Salud Pública, una inversión prevista en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
La reducción del gasto ministerial en los equipos de Salud Pública no es algo sintomático de que hayan hecho menos falta este año. Prueba de ello es que, como ha podido comprobar este diario, la inversión en esta partida ha crecido en la gran mayoría las comunidades autónomas.
En términos absolutos, las regiones que más aumentan su inversión en Salud Pública son Galicia y Castilla y León. Este año, ambas CCAA han dedicado 13 millones de euros más a esta partida. A continuación se sitúa Castilla-La Mancha, con 12 millones más de inversión.
Seguidamente tenemos a Canarias y Comunidad Valenciana, que incrementan el gasto en 7 y 6 millones de euros, respectivamente. Continúan el ranking Aragón y Baleares, que han dedicado 4 millones de euros más. Con cifras más reducidas, pero que también incrementan la partida, se sitúan Cantabria, con 3 millones más, y País Vasco y Extremadura, con 2 millones más.
Asturias, Navarra y La Rioja solo han dedicado un millón más a estas partidas, mientras que Murcia apenas ha incrementado este presupuesto en 400.000 euros. Cataluña mantuvo el mismo presupuesto en Salud Pública en 2021 y en 2020, ya que tuvo que prorrogarlos al no poder pactar el Gobierno regional otros nuevos. Madrid tampoco aumenta su gasto en estos equipos, y mantiene el de 2020. Solo hay una comunidad que, al igual que el Gobierno central, reduce su gasto en Salud Pública, y es Andalucía. En 2021 se presupuestaron 2 millones de euros menos que el año anterior.
