Uno de los mayores logros de la carrera de Francisco Pato Clavet es, lo dice alto, ganar la Ensaladera de 2000. Hoy ve la competición desde el otro lado, subdirector de la Copa Davis 2021, y admite en su recorrido con ABC en un Lexus de la organización que, cuando jugaba, no era tan consciente de todo lo que es manejar un evento tan grande. «Me tenía que preocupar de menos cosas, desde luego. En la pista era distinto, pero la logística era más simple», admite entre bromas.
A dos días para que termine, ¿cuál es el resumen que haría de esta Copa Davis 2021?
Estamos muy satisfechos de cómo está funcionando y ha funcionado durante estos días la competición. El balance es muy positivo, a nivel de competición, de los equipos que han venido. Todos han estado bien, nos han hecho llegar sus felicitaciones, han estado muy contentos y muy a gusto. A nivel de asistencia de público también ha sido un éxito. A pesar de que España no pudo pasar la fase de grupos, lo que podemos sacar en positivo es que la gente ha seguido asistiendo a los demás partidos y estamos muy contentos porque en casi todas las eliminatorias la entrada ha sido maravillosa.
¿Cuál ha sido el avance sobre 2019?
Es muy importante el tema de las sedes. Haber dividido a los países en tres sedes diferentes, con seis grupos de tres equipos ha ayudado a todos los niveles: logístico, de organización, de competición, de entrenamientos. Es más difícil porque tienes que coordinar las tres sedes, pero creo que es una de las cosas positivas que se ha aprendido de la última edición. Poco a poco se van implementando cosas que se aprenden de la experiencia y que ayudan a la siguiente. Creo que lo más importante ha sido eso, las tres sedes y que se concentre en Madrid dos cuartos, las semifinales y la final.
¿Ha podido ver tenis estos días?
Sí, he estado ocupado, atendiendo muchas cosas. Pero he tenido la suerte de tener tiempo para ver partidos y eliminatorias que han estado muy interesantes. Se han visto partidos extraordinarios, además de los grandes jugadores ya consagrados, también de otros jugadores que han demostrado que tienen un altísimo nivel de tenis y que dan espectáculo. La gente se ha divertido también conociendo nuevas caras. Este formato, al ser dos individuales y un dobles, es mucho más abierto y da lugar a que haya más sorpresas y eso hace más interesante la competición.
¿Cuál ha sido la respuesta de los jugadores?
En general bastante positiva. La aceptación ha sido muy buena. La mayoría de ellos están muy contentos. Evidentemente hay cosas que mejorar, hay que ver el calendario, ver dónde encaja mejor para ellos, para su año, el tema de las sedes... Hay cosas que hay que ajustar, pero estamos en el buen camino, estamos haciendo una buena labor. Consensuando con jugadores y Federación, que son los que tienen la última palabra, pero todos han entendido el concepto, y que se está haciendo un gran esfuerzo de la organización para que haya una implicación grande por su parte. Están todos contentos, están disfrutando. Y esperando que sea así para próximas ediciones.
¿Esta es la Davis que le hubiera gustado tener como tenista?
En ese momento ni se planteaba. Los tiempos cambian y había que hacer algo con la Copa Davis. Es una competición histórica. Al principio el cambio de formato fue un poco un shock en el mundo del tenis porque se rompía con una tradición, pero se estaba viendo que quedaba algo obsoleta. Se jugaba durante todo el año, se rompía mucho el calendario, muchos jugadores ya habían pedido que se reformara. Creo que ya se ha hecho. Es una apuesta, es un riesgo, pero había que asumirlo. Pero se va entendiendo y se va a imponer y será positivo para el tenis. Se reducirá el calendario, se concentrará en 10 días. Cuando hay novedades hay que asimilarlas, entenderlas y poco a poco la gente lo va a apreciar, igual que los jugadores, que es algo positivo.
¿Con qué se queda más satisfecho de esta edición?
De que en general todo ha salido bien y de que los equipos estén satisfechos. Es lo primordial. Que los jugadores estén contentos y se sientan a gusto en la competición, que quieran volver, repetir y que se quieran involucrar.
Y también con la respuesta del público. Ha respondido de una manera increíble. Teníamos un poco de miedo en ese sentido, de cómo iba a ser sobre todo cuando no jugara España. Pero han seguido viniendo con independencia de que jugara o no España y eso es algo digno de agradecer. Y muy bonito. Después del esfuerzo de organizar un evento de estas características que venga el público es un reconocimiento a todo ese esfuerzo.
¿Es el tenis el deporte más difícil de gestionar?
Sí, no es nada fácil Como jugador no era consciente de lo que supone una organización de este tipo, de estas características y esta magnitud. Ahora sí que lo estoy viendo desde el otro lado y toda la gente de Kosmos tiene un valor increíble y un mérito increíble. Son muchas cosas que tienes que tener en cuenta: coordinar tres sedes, que vengan los equipos de unas aquí, ver quién se clasifica en el último momento. Multitud de detalles que tienes que tener en cuenta y que tienes que resolver sobre la marcha porque no puedes predecir quién va a ganar o quién no va a ganar. No es fácil organizarlo, pero han hecho una labor increíble. Hay que dar la enhorabuena.
¿Era más fácil ser tenista? ¿Dormía mejor?
Bueno, te tenías que preocupar de menos cosas, eso desde luego. Ya en la pista era complicado, pero la logística era más simple. De dormir, más o menos, tienes otras preocupaciones. Cómo jugar, los nervios de si vas a ganar. Cada cosa tiene sus problemas e inquietudes. Pero me lo paso bien. Son días intensos, largos, pero cuando disfrutas y te lo pasas bien se hace más llevadero.
¿Qué podemos esperar de la edición de 2022?
El formato será muy parecido. Se está trabajando en cosas más puntuales. Hablando con los jugadores y buscando fechas más cómodas para ellos y cómo encajarlo de la mejor manera posible. Lo fundamental es el tema de fechas, pero a partir de ahí todo está bastante bien engranado.
¿Madrid estará dentro de las sedes?
A mí me encantaría, pero ni lo sé ni estoy involucrado. A todos nos gustaría. Pero por el carácter rotatorio de la competición tiene que estar en todos los países. Hay muchas peticiones de otros países que quieren tener la competición también, como es normal. Madrid ha tenido la suerte de tener la primera edición y esta y seguramente alguna más, o Madrid o alguna otra ciudad de España. Pero hay que escuchar también a otros países que quieren tener una competición tan especial como esta.