Es una combinación de suba de los valores de locación y caída del poder adquisitivo. Además, según una consulta de Inquilinos Agrupados casi la mitad de los consultados dijo tener deudas con tarjetas de créditos, bancos, locadores o servicios.
Siete de cada diez inquilinos destina entre un tercio y la mitad de sus ingresos a pagar el alquiler, según los resultados de una encuesta nacional realizada por Inquilinos Agrupados (IA) en septiembre.
Del relevamiento surge que sobre 2400 inquilinos consultados en todo el territorio nacional, el 24,3% reserva 40% de los ingresos totales del hogar al pago del alquiler, mientras que 23,6% destina 30% y para el 20,7% el gasto en el alquiler de la vivienda representa un 50% del ingreso.
Por otra parte, la encuesta dio cuenta de un elevado endeudamiento entre los inquilinos. Casi la mitad (48,8%) aseguró estar endeudado, sobresaliendo las deudas con la tarjeta de crédito (30,1%), deudas con familiares (15,2%), con entidades bancarias (14,8%), financieras (6,8%), mientras que las deudas de alquileres representan el 5,8%.
Al respecto, desde Inquilinos Agrupados, aseguran que el porcentaje de deuda de alquileres "es bajo porque lo último que se deja de pagar es el alquiler y cuando no se puede pagar son desalojados legalmente o por la fuerza".
la tendencia
Del estudio se desprende que el 80% de las respuestas se concentraron en la franja etaria entre los 26 y los 45 años, lo que "demuestra que la condición inquilina se va extendiendo a sectores adultos, llegando a los 45 años, mientras que en 2001, según datos del Indec, llegaban a los 40 años".
En el desagregado por tipología de inquilinos, se destaca que el 26,8% de los que alquilan son grupos familiares de pareja con hijos, 23,9% parejas sin hijos, 21,2% vive solo/a y el 14% son familias monoparentales (padre o madre) con hijos a cargo.
En un contexto de inflación que ronda el 50%, la encuesta reveló que para el 50,6% de los consultados la renovación de contratos de alquiler tuvo aumentos de hasta el 60%, mientras que el 28,8% aseguró que los incrementos estuvieron entre el 70 y el 150% y un 17,7% dijo que los ajustes se movieron entre 20 y 30%.
"El acceso a la vivienda en Argentina se ha transformado en uno de los problemas estructurales más subestimados; o se profundizan las regulaciones del acceso a la vivienda en alquiler o no habrá forma de frenar la crisis habitacional pero tampoco de recuperar la economía, mientras que 3 millones de familias inquilinas destinan la mitad de los ingresos totales del hogar al pago del alquiler", señaló Gervasio Muñoz, presidente de Inquilinos Agrupados.
Desde la entidad consignaron importantes variaciones en los valores de locación dependiendo de la provincia o distrito. Así, mientras el precio promedio de alquiler de un monoambiente ronda los $ 13.500 en la provincia de San Juan, en la Ciudad de Buenos Aires trepa a $ 23.000.
Por su parte, un 3 ambientes tiene un costo de alquiler de $ 20.000 en San Juan, $ 22.500 en Santa Fe, $ 24.500 en Córdoba, $ 25.000 en Mendoza, $30.000 en Río Negro y en Neuquén, $ 31.000 en Santa Cruz, $ 32.000 en la provincia de Buenos Aires y $ 37.000 en la Ciudad de Buenos Aires.
