La nueva tarifa eléctrica, unida al encarecimiento sin precedentes de la energía que se está registrando en los últimos meses, se ha convertido en una grave amenaza para el sector económico. La factura, en concreto, va a registrar incrementos de hasta el 30% en las empresas, en lo que supone un auténtico torpedo en su línea de flotación. Así lo advierten los sectores más representativos de la provincia de Alicante, sobre todo los exportadores, que ven cómo se está poniendo en riesgo su competitividad a la hora de vender en el exterior.