El estudio propondría acciones para un uso más eficiente de portadores energéticos
CIEGO DE ÁVILA.— La Oficina Nacional para el Control del Uso Racional de la Energía (Onure) en Ciego de Ávila supervisa a centros con altos consumo de corriente para aplicar en ellos la ISO 50001, norma internacional con la cual se facilita un mejor desempeño energético.
Iván Powell Jardinson, director de la Onure en la provincia avileña, informó que en estos momentos se recopila información en aquellas entidades identificadas con un gasto de corriente cuyos niveles oscilan sobre los tres mega watts, con una alta incidencia en el gasto de electricidad del territorio.
«Las empresas con las que hemos comenzado el estudio son la Fábrica de Calentadores Solares, la UEB Muebles Lídex, la Empresa de Productos Lácteos, Ciegoplast y la Empresa de Cepillos y Artículos Plásticos (Cepil) Juan Antonio Márquez», informó el directivo.
Con la información recogida, los especialistas de la Onure efectuarán un análisis que permita identificar los puntos vulnerables donde se generan pérdidas en el uso de la energía y hacer propuestas encaminadas a la implementación y certificación de la ISO 50001.
«Finalizada la primera parte del estudio, se propondrían acciones que podrían ir desde el reacomodo de cargas y sustitución de equipamiento hasta el diseño de un programa dirigido a poner en práctica tecnologías que permitan un mayor ahorro, y con ello un incremento de la eficiencia económica», explicó Powell Jardinson.
En la primera parte del estudio, la Onure ha identificado como dificultades generales la obsolescencia tecnológica; la diversidad de equipos con distintos rangos de consumo energético, en ocasiones no compatibles entre ellos para estabilizar los niveles de cargas, y la carencia de instrumentos de medición para realizar un control sistemático del comportamiento de la electricidad.
Otra dificultad consiste en que se desaprovechan las potencialidades de los llamados técnicos energéticos, muchas veces destinados a funciones burocráticas y no como especialistas que pudieran estudiar, asesorar y proponer políticas para mejorar el uso de la energía.
A esto se suma un pobre vínculo con centros de investigación del territorio donde pudiera gestionarse una maestría en Eficiencia Energética, desarrollada por la Universidad de Ciego de Ávila.
Las propuestas iniciales podrían ser la de mover niveles de consumos a horarios fuera de los picos eléctricos, en los que el kilowatt tiene un costo mayor, hacia otros donde la tarifa sea menor y se amplíen los márgenes de utilidades, lo que también podría implicar una reorganización de los turnos laborales.
A partir de los resultados del estudio, y de aplicarse un programa de mejoramiento, las entidades se someterían a un control por la Oficina de Normalización para certificar finalmente a esos centros con la ISO 5001, aplicable a cualquier tipo de energía, norma que permite mejorar la competividad de las empresas y reducir la emisión de gases de efecto invernadero, entro otros impactos al medio ambiente.
Descargue aquí la Norma ISO 50001:
La importancia de contar con ISO 50001 en el sector minero.
La eficiencia energética con la ISO 50001 en las organizaciones.
