La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, han arropado este sábado a Edmundo Bal en su presentación como candidato a las elecciones de la Comunidad de Madrid en un acto celebrado en la céntrica Plaza de Santa Ana de Madrid. Han asistido los integrantes de su lista y también Ignacio Aguado, el anterior cabeza de cartel, que no va en su candidatura y que se ha mantenido en un segundo plano mientras el candidato y las dos dirigentes del partido le agradecían "su generosidad". Tanto Arrimadas como Bal y Villacís han reivindicado insistentemente "el centro político, moderado y sensato" que creen que representa la candidatura del abogado del Estado, con el que se han deshecho en elogios por no haberse "arrodillado ante Sánchez y los golpistas catalanes" al negarse a firmar un documento para que fueran juzgados por sedición y no por rebelión, un episodio que ha recordado también el propio Bal durante su discurso. "Cuando tenía la vida resuelta se la jugó por defender sus principios y sus valores", ha dicho Arrimadas, para sentenciar: "Edmundo está preparado para presidir y liderar un proyecto para Madrid" y frenar a "los extremismos".
La líder de Ciudadanos, que llegó con el acto empezado y cuando Villacís había terminado su introducción, ha pedido a los dirigentes de su partido que "no tiren la toalla" –ante los malos pronósticos que les dan las encuestas–, se movilicen y vayan a votar el 4 de mayo porque "cuando la moderación se queda en casa, triunfa el populismo y la radicalidad". Una petición que también hizo en las pasada elecciones en Catalunya, en las que Ciudadanos pinchó y pasó de 36 escaños a tener solo seis y de ser la primera fuerza política a la séptima.
Arrimadas y Villacís se han volcado en animar a los suyos y en destacar las bondades y la "impecable carta de servicios" del nuevo candidato, al que han jaleado los asistentes al acto proclamándolo al final "presidente, presidente". Tanto Arrimadas como Villacís y Bal han tenido un reconocimiento hacia Aguado, sobre todo la vicealcaldesa de Madrid, que compartió las anteriores elecciones formando tándem con él y que se ha llegado a emocionar al destacar su "generosidad". "¿Os imagináis a muchos politicos haciendo lo que ha hecho Ignacio de dar un paso a un lado por el bien de España? Gracias, Ignacio, es un orgullo presidir un partido en el que hay gente como tú" , le ha dicho la líder de Ciudadanos. "Contra la corrupción, Edmundo Bal", ha sentenciado. Entre el público también estaba Ángel Garrido, que ha anunciado su retirada de la política y que fue citado de pasada por Villacís.
Bal ha tomado al final la palabra para reconocer que estaba "muy, pero que muy emocionado" al verse rodeado de los suyos: "Veo que os brillan los ojos, yo tengo el corazón como cuando salgo a correr o toco la batería", ha desvelado el candidato, que se ha definido como "un chico de barrio que ha trabajado y siente Madrid aquí", ha dicho, llevándose la mano al corazón. Bal ha agradecido a las dos dirigentes del partido su apoyo. "No voy a cambiar", les ha prometido. "Siempre voy a ser uno de los vuestros, con Inés", ha dejado dicho para despejar dudas ante la avalancha de dirigentes que se han ido marchando de Ciudadanos hacia el PP. Por si había dudas, ha preguntado a los asistentes: "¿Alguien me ve a mí en el PP tapando y negando la corrupción, o en el PSOE haciendo la pelota a Sánchez?". "Yo solo tengo unos principios y os los ofrezco, son los de Ciudadanos. Estoy aquí porque lo siento, soy de Ciudadanos", ha zanjado.
El candidato cree que con su aterrizaje en la contienda madrileña puede romper la mayoría absoluta que intenta conseguir Isabel Díaz Ayuso. Y ahí ha atacado al partido con el que han estado hasta hace escasas semanas gobernando en coalición en Madrid recordando su corrupción, aunque sin hacer mucha sangre. "Yo he peleado siempre contra la corrupción del PP y de los Pujol", ha reivindicado Bal, que ha destacado que él siempre ha defendido que ese dinero fuera para "la dependencia" y otras partidas sociales "y no a las gambas y al bolsillo de otros".
También se ha negado a que los extremismo puedan dividir a los madrileños. "Aquí en Madrid no hay fachas o rojos, solo hay gente buena", ha añadido, rechazando que en la capital partidos como "Podemos, Más Podemos –en referencia a Más Madrid– o Vox" fomenten la política "de las trincheras". El acto terminó entre aplausos de los asistentes y con los tres dirigentes de Ciudadanos subidos al escenario, ya con mascarilla, destacando la del candidato, de color naranja de Ciudadanos.