Los industriales de las atracciones han mantenido este lunes por la mañana una reunión con la Junta de Andalucía en la que han confirmado que la propuesta del parque de atracciones planteada dentro del recinto ferial de Sevilla está dentro de la normativa y que, por tanto, se puede realizar. Posteriormente se han reunido también con los responsables municipales. Desde el Ayuntamiento de Sevilla informan de que en estos momentos se están realizando algunos ajustes técnicos en el proyecto, pero mientras tanto «ya se les ha indicado que pueden empezar a instalarse en el recinto ferial».
Las mismas fuentes confirman que Vive Park se trata de «un recinto cerrado, con entradas y salidas, y con amplias distancias». Además, el número de atracciones es muy inferior a las que suelen venir en una Feria y el espacio y las distancias entre unas y otras es muy superior.
El objetivo es que puedan instalarse durante aproximadamente un mes en sevilla y luego se traslade a otras ciudades.
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Como ya adelantó ABC, Vive Park, el flamante proyecto promovido y gestionado por la Asociación de Industriales Feriantes de Andalucía, Ceuta y Melilla verá la luz en Sevilla a finales de marzo y la instalación de las atracciones ya ha comenzado. Vive Park, nombre con el que se bautizó la iniciativa, «tiene mucho más de Isla Mágica, Parque Warner o Port Aventura que de Feria de Abril», como declaró a este medio el presidente de la asociación, Antonio Palacios.
«Sigamos viviendo»
El nombre elegido para el proyecto no es casual, ya que la pandemia ha provocado que lleven más de un año solamente sobreviviendo, por eso el eslogan es «Sigamos viviendo», como explicaron al anunciar el proyecto. Vive Park se instalará en el recinto ferial de Sevilla, acondicionado para la ocasión en un parque de atracciones de más de 80.000 metros cuadrados, y arrancará el 26 de marzo, permaneciendo activo hasta el domingo 25 de abril.
Esta primera experiencia será el punto de partida de un nuevo concepto, el de parque de atracción móvil, al que los feriantes se aferran como tabla de salvación y que en los próximos meses recorrerá gran parte de la geografía andaluza: Jerez de la Frontera, Huelva o Córdoba, ciudades con cuyos ayuntamientos la asociación mantiene muy buena sintonía en estos momentos y ya se están perfilando los respectivos planes.
El presupuesto del proyecto supera los 600.000 euros, ya que incluye en sus partidas seguridad, vallado perimetral del recinto, montaje, aseos, consumo eléctrico, centro de transformación, hilo musical y un largo etcétera tienen la culpa. Habrá siete entradas perfectamente definidas y con control de aforo, zonas de desinfección y numerosos efectivos de vigilancia. Además, los negocios de alimentación (churrerías, hamburgueserías, etc.) dispondrán de mesas para el consumo, ya que estará prohibido comer o beber transitando por el recinto.
El triple de distancia
En este sentido, conviene recordar que el primer borrador del proyecto presentado a Sanidad fue catalogado como un evento de riesgo medio-bajo, pero tras las nuevas medidas llevadas a cabo por la Asociación de Feriantes ha sido catalogado de riesgo bajo. Entre las modificaciones destaca la separación entre las diferentes atracciones (más del triple de distancia respecto a lo que se estilaba en cualquier feria antes de la pandemia). En cuanto al número de atracciones que estarán presentes en Vive Park (en torno a 100, más de 200 si se añade el circo, las tómbolas, casetas de habilidad, puestos de comida, etc.), la mitad en comparación a las que había en la feria de abril de 2019.
Con este proyecto se celebra en el sector como agua de mayo los más de mil puestos de trabajo directos que va a crear Vive Park, además de muchos otros indirectos y el gran impacto económico que tendrá en la ciudad con un aforo de 9.200 personas, el más multitudinario de cuantos se celebren esta extraña primavera en Sevilla.
