Caja Rural de Zamora obtuvo un beneficio de 24,7 millones durante el año 2020, una cifra que supone un 1,7 por ciento menos respecto al año anterior debido a los efectos del Covid pese a lo que mantiene «una alta rentabilidad» en un escenario económico difícil.
La entidad de crédito ha presentado este martes su balance anual con la presencia del presidente, Nicanor Santos, y del director general, Cipriano García, el encargado de desvelar los números, que arrojan un crecimiento de negocio del 18 por ciento, cifra que dobla la de 2019, informa Ep.
A ello hay que añadir el crédito nuevo a empresas y particulares durante 2020, que se ha traducido en un 33,1 por ciento hasta alcanzar los 859 millones de euros, frente a los 645 del ejercicio anterior. «Una prueba indudable de nuestro apoyo al tejido productivo en momentos tan difíciles como los actuales», ha señalado García.
El director general ha explicado que la rentabilidad de Caja Rural de Zamora se apoya en la recurrencia de los ingresos, el control de los costes y la calidad de la cartera de inversión. Además, ha aseverado que las «sólidas bases» de la estrategia de negocio del año 2020 «han permitido mantener los beneficios pese a la paralización de la economía causada por el coronavirus».
