La ocupación de las unidades de cuidados intensivos de los hospitales de Castilla y León descendió de nuevo en las últimas horas hasta el 36,35 por ciento -197 pacientes-, mientras la incidencia acumulada a 14 días bajó ligeramente hasta los 155,33 casos por cada 100.000 habitantes y la referida a siete días, hasta los 64,51 casos, según los datos facilitados por la Consejería de Sanidad. En ese sentido, la ocupación de las UCI sigue en riesgo extremo, al situarse por encima del 25 por ciento previsto en el «semáforo» de actuaciones coordinadas, pero ya muy cerda 35 por ciento fijado por la Junta para iniciar la desescalada en la Comunidad prevista para el próximo lunes si se consolidan estos parámetros.
La ocupación más baja se registra en la provincia de Ávila, con un 16,67 por ciento, mientras le siguen Salamanca, con un 21,62 por ciento, y León, con un 28,28. Las peor situadas serían Valladolid (43,5%) y especialmente Soria, con un 76 por ciento de pacientes Covid en sus unidades de críticos. Mientras, las plantas de hospitalización presentan un mejor comportamiento, puesto que los enfermos de coronavirus ocupa solo el 7,81 por ciento de las camas. En todo caso, anotaron 30 nuevos ingresos, frente a las 80 altas de las últimas horas, según los datos de la Consejería de Sanidad.
Menos casos
Los signos de alivio también se demuestran en el descenso de casos al pasar de 280 a 220 en 24 horas. Pese a que se anotaron nueve muertes más, todas en hospitales, el ritmo de fallecidos también lleva días a la baja. No obstante, la lista de decesos a lo largo de la pandemia se aproxima ya a los 5.400, en concreto, 5.396.
