El 90% de los 700.000 trabajadores que han perdido su empleo durante la crisis sanitaria tiene un bajo nivel de formación, mientras que el 95% estaba empleado en una ocupación básica, según un informe de Asempleo publicado este lunes, en el que se destaca que la crisis «se ha cebado especialmente» en este tipo de trabajadores.
Aunque en términos absolutos los trabajadores más afectados por la crisis del Covid han sido los trabajadores cualificados, en términos relativos los trabajos más afectados han sido los infracualificados, al igual que ocurrió en la crisis de 2008.
No obstante, la infracualificación viene registrando desde hace tiempo una tendencia decreciente y solo afecta actualmente al 11,3% de los trabajadores, cuando antes de la crisis financiera afectaba a un 20,7%.
«La crisis del coronavirus está teniendo un impacto asimétrico en los trabajadores según el grado de ajuste entre la formación y la educación que poseen (...) Esto pone de manifiesto la importancia de la educación como factor de seguridad y resiliencia ante shocks económicos», apunta el informe.
Como resultado de la crisis del Covid-19, actualmente el 51,1% de los trabajadores españoles se encuentra cualificado para su puesto de trabajo, cifra inferior a la del periodo de antes de la pandemia (51,3%) y a la del final de la crisis anterior (53%).
Sobrecualificación
Según Asempleo, mientras que la infracualificación no deja de disminuir, la sobrecualificación no deja de aumentar y ya afecta a uno de cada tres trabajadores, destacando los jóvenes y los ocupados de sectores como hostelería y comercio. En concreto, el colectivo de sobrecualificados lleva aumentando durante los últimos 12 años y ahora agrupa al 37,7% de los trabajadores españoles, ocho puntos más que en el tercer trimestre de 2008.
Los menores de 24 años son el colectivo que más sufre el problema de la sobrecualificación, pues afecta a la mitad de trabajadores de esta cohorte de edad, según Asempleo.
Asimismo, la sobrecualificación es especialmente relevante en actividades como el comercio, la hostelería u otros servicios relacionados con el ocio, donde casi la mitad de los trabajadores (46%) tienen un nivel de formación superior al teóricamente requerido para su puesto de trabajo.
El presidente de Asempleo, Andreu Cruañas, ha constatado, a la luz de estos datos, que el impacto de la crisis provocada por la pandemia ha sido «muy asimétrico» por sectores, regiones y también por niveles de cualificación. De hecho, ha impactado en mayor medida en aquellas comunidades con más trabajadores infracualificados.
Así, Cruañas ha resaltado que los trabajadores con más cualificación tienen menos probabilidad de perder su empleo ante cualquier tipo de crisis. Por ello, considera que, cuando «amaine» la pandemia, se tendrá que invertir en formación y educación.