Hablemos sobre el famoso rebote, como una chica metida en el mundo del fitness, gran parte de mi vida he escuchado como la gente a mi alrededor se queja del rebote y tengo varias cosas que quizás te resulten útiles. ¿Qué hago para no rebotar? El primer gran consejo que todas las chicas me piden […]
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Hablemos sobre el famoso rebote, como una chica metida en el mundo del fitness, gran parte de mi vida he escuchado como la gente a mi alrededor se queja del rebote y tengo varias cosas que quizás te resulten útiles.
El primer gran consejo que todas las chicas me piden es ¿ cómo le hago? La respuesta es sencilla, pero es algo que casi nadie quiere escuchar. Lo que pasa es que el rebote viene cuando regresas a tus hábitos anteriores, cuando realmente no entendiste que los cambios de alimentación y de ejercicio debían ser constantes, realmente constantes para conseguir un cambio positivo. Rebotar es el resultado de tu nuevo yo volviendo a hábitos pasados.
S.O.S. Estoy a dieta pero todo se me antoja, ¿cómo le hago para no pecar?
Por eso algunas personas no ven sustentables los cambios de una dieta. Es porque una dieta es para siempre, aunque esto no debería significar que dediques toda tu vida por ejemplo a estar en cetosis o a comer solo vegetales. Las buenas dietas te enseñan a comer, no te restringen.
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A menudo me preguntan qué pasará cuando se les antoje ir por una pizza o tomarse más de dos tragos en una noche. La verdad es que no pasa nada, el problema viene cuando haces de estos “antojitos” una rutina constante. No pasa nada si un día se te antoja una pizza, probablemente con tus nuevos hábitos no te vas a querer comer más de 3 pedazos. No pasa nada si te comes ese postre y mucho menos si repites. El caso es que no puedes ingerir digamos una porción de pastel de chocolate a diario esperando tener un abdomen perfecto.
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Creo que es importante recalcar que todas fluctuamos de peso en algunos momentos del mes, ya sea por estrés o porque se nos viene el periodo. Fuera de eso el rebote es algo imaginario, es algo que tu misma provocas. Tenerlo consciente es quizás lo mejor, porque de esta forma puedes comenzar a hacer cambios de otra forma. Por ejemplo que tal si esta vez en vez de concentrarte en tener un cuerpo bonito te animas a hacerlo por tu salud. comerte esa rica ensalada porque te sientes mejor al comer cosas naturales.
El rebote es un problema para muchas chicas, porque llevan a cabo dietas muy poco saludables o están enfocadas a un resultado físico que es poco sostenible. Recuerda que muchas veces lo que ves en Instagram es el resultado de un buen filtro, una buena pose o un buen momento por la mañana sin retención de líquidos.
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