El malestar y las protestas explícitas han vuelto. Un nuevo grupo de diez vocales del Consejo, incluida una persona propuesta por el PSOE, ha remitido dos escritos al presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes, donde piden que el órgano sea escuchado en la nueva reforma exprés, planteada por PSOE y Podemos para impedir que el Consejo pueda realizar nombramientos cuando algunos de sus miembros se encuentren en funciones.
Alterar las competencias y reglas de juego del poder judicial establecidas por mandato constitucional, es una operación política de enorme gravedad. Son los propios magistrados los que lo están señalando alto y claro: si el Gobierno sigue por este camino corren peligro las bases del sistema democrático.