Aunque estos últimos meses han sido muy complejos para el deporte en general, poco a poco algunas disciplinas van cumpliendo, en la medida de lo posible, su calendario internacional previsto para noviembre y diciembre. Días atrás les correspondió a integrantes de los equipos masculino y femenino de judo de Cuba ser los primeros en reaparecer en el escenario internacional por nuestro país, durante el Campeonato Panamericano en Guadalajara, México, y el venidero lunes otra delegación antillana competirá fuera de la Isla.
Se trata del conjunto varonil de baloncesto, que concursará en la segunda ventana clasificatoria para la FIBA AmeriCup 2022, que acontecerá los días 29 y 30 de noviembre en una cancha habilitada en el Hotel Hard Rock de la localidad dominicana de Punta Cana, conocido destino turístico a nivel mundial. Allí se celebrarán los dos partidos bajo el formato “burbuja”, que intenta garantizar la seguridad sanitaria ante el nuevo coronavirus.
El plantel dirigido por José Ramírez llegará a la sede el jueves, en vuelo directo desde La Habana a Santo Domingo, según informó a Juventud Rebelde un miembro de la Comisión Nacional de la disciplina.
Con balance de un triunfo y un revés contra Islas Vírgenes de Estados Unidos, durante la primera ventana desarrollada en febrero, esta vez el plantel insular efectuará un solo partido, el lunes en la noche frente al representativo local, pues Canadá, el otro miembro del Grupo C, finalmente no competirá debido a restricciones de viajes impuestas por el gobierno canadiense por la COVID-19. El choque restante corresponderá a quisqueyanos y virgenenses el domingo.
Una fortaleza de este conjunto antillano en comparación con otros más recientes es que ocho de sus 12 jugadores (67 por ciento) se encuentran vinculados a ligas extranjeras, como son los casos en Nicaragua de Osmel Oliva, Lisván Valdés, Yoel Cubillas y Yuniskel Molina; Pedro Bombino y Yoanki Mencía en Argentina; Karel Guzmán en Rumanía y Jasiel Rivero en España.
Precisamente en Rivero caerá nuevamente buena parte de la responsabilidad ofensiva de las huestes de Pepe Ramírez, sobre todo por la muy buena segunda temporada que está teniendo en la ACB con su club Hereda San Pablo Burgos. De los 11 partidos de su elenco, ha salido como titular en nueve, acumulando 130 puntos (con record de 25 en un desafío), nueve triples en 21 intentos, 58 rebotes y nueve asistencias, mientras que sus porcentajes en tiros libres y de dos puntos son de 63,8 y 62,3, respectivamente.
Si se espera que el aporte del ala-pívot sea valioso, no debemos perder de vista lo que pueda ofrecer el cuarteto que milita en la Liga Superior nicaragüense, donde aparecen entre los punteros en varios apartados y, curiosamente, cada uno está incluido en el top ten de máximos anotadores, liderado por Lisván.
A simple vista resaltan dos notables ausencias: las del interior santiaguero Javier Jústiz (Casademont Zaragoza, ACB), quien se recupera de una operación de meniscos sufrida a inicios de año, y el ala-pívot habanero Marvin Cairo (Brumas de Jinotega, Liga Superior nicaragüense), aquejado de una lesión en una de sus rodillas.
Los cuatro países integrantes de la llave C archivan un éxito y un tropiezo.
Nómina de Cuba: Osmel Oliva (ART), Lisván Valdés (LHA), Yoel Cubillas (VCL), Yuniskel Molina (MTZ), Jasiel Rivero (LHA), Karel Guzmán (LHA), Pedro Bombino (CAV), Yoanki Mencía (SSP), Pedro Roque (LHA), Freddy Marín (LHA), Neslier Abreu (VCL) y Neysser Coutín (LHA). DT: José Ramírez.
