En los últimos días la contrarrevolución, mediante el autodenominado Movimiento San Isidro, han estado haciendo exigencias al gobierno cubano. Personas honestas han manifestado en redes sociales su preocupación por las consecuencias que pudiera tener una «huelga de hambre» para la salud de los ciudadanos implicados. La vida humana, convertida otra vez en objeto de manipulación política, juega en el contexto actual a favor de la campaña permanente de hostilidad y descrédito contra la Revolución Cubana.
Lo que aparentemente comenzó como un gesto de solidaridad con un presunto rapero, sancionado por desacato y agresión a un policía, mutó hacia posiciones de fuerza que exigen al Estado la eliminación de una de las medidas económicas implementadas como consecuencia de la compleja situación económica que vive el país.
La narrativa que construyen los adversarios de nuestro proyecto político subraya los aparentes obstáculos que enfrentan el pensamiento, la divergencia y el uso efectivo de los derechos políticos en Cuba. En los últimos años sobran ejemplos, en medio de circunstancias muy hostiles, de los esfuerzos del gobierno cubano por construir un proyecto inclusivo, que respete la diversidad y genere espacios para todos. Aun cuando la profundización de nuestra democracia socialista sea un empeño permanente, la manipulación, la violencia, el chantaje y la imposición de agendas contrarias a la voluntad soberana de existir como Nación, no son ni serán los caminos que conduzcan al diálogo.
A los jóvenes creadores nos importan todas las vidas, incluidas las de quienes se autodefinen como enemigos políticos de la Revolución. Las instituciones, acusadas ahora de irreflexivas, demagogas y excluyentes, han puesto, junto a nuestro pueblo, el rostro y los hombros en un esfuerzo gigantesco por preservar la vida de millones de ciudadanos del impacto de la Covid-19, sin distinción alguna. Desconocer la ética y el humanismo con que el Estado Cubano ha obrado, como pretende esta maniobra contrarrevolucionaria, destierra toda objetividad.
Desde la Asociación Hermanos Saíz, seguiremos auspiciando el quehacer de los jóvenes creadores, generando espacios inclusivos y propositivos, siempre desde el compromiso con el proyecto de Nación que construimos, que es el compromiso con todo un pueblo y su soberanía.
Dirección Nacional AHS