Si algo ratificó la inauguración del Encuentro Juvenil Internacional Ideas que son banderas —que desde este martes sesiona de forma virtual— es que las nuevas generaciones no cederán ni un milímetro en defensa de la independencia, la soberanía y la justicia social, ni renunciarán a la solidaridad con los pueblos que luchan y resisten para seguir construyendo ese mundo mejor que Fidel soñó y ayudó a edificar.
La unidad para la solidaridad, el antimperialismo y el antineoliberalismo continúan siendo banderas de los jóvenes de izquierda y progresistas del planeta, como expresó Diosvany Acosta Abrahante, primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), al comenzar el evento y agradecer a las más de 2 000 organizaciones de 162 países que habían dado respuesta entusiasta a la convocatoria para este Encuentro.
Durante la jornada inicial se escuchó la voz de líderes juveniles y estudiantiles de todas las regiones del planeta, así como de destacadas personalidades que acompañan este esfuerzo y transmitieron su mensaje a las juventudes, entre ellas Sam Nujoma, padre fundador y primer presidente de Namibia, y Mónica Valente, secretaria ejecutiva del Foro de Sao Paulo.
Cada intervención fue una ofrenda de amor y solidaridad a la Mayor de las Antillas y de agradecimiento por contar con una Revolución que sigue siendo faro y guía para quienes se oponen a la dominación imperialista, a sus sucias acciones y a sus planes macabros; pero para quienes también han resistido estos duros años de neoliberalismo y capitalismo salvaje.
A la inauguración del Encuentro asistieron Ángel Arzuaga Reyes, vicejefe y coordinador del departamento de Relaciones Internaciones del Comité Central del Partido; Diosvany Acosta Abrahante, primer secretario del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas, y el Héroe de la República Fernando González Llort, presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, entre otros invitados.
Por América y África y Medio Oriente comenzaron los encuentros regionales, concebidos como espacio para compartir experiencias y realidades; y que no por ser online fue impedimento para que se escucharan muy fuerte las denuncias de los jóvenes y para que se ratificara el apoyo de ellos a las causas justas de los pueblos.
Entre las ideas abordadas estuvo el derecho a la paz, a la soberanía y a la educación, la influencia negativa de las sociedades de consumo en la destrucción del medio ambiente, la defensa de la no intervención norteamericana en los asuntos de los países, y se ratificó la convicción de los jóvenes latinoamericanos de «luchar por la justicia hasta las últimas consecuencias».
Milagro Rivera, en representación del Comité de Solidaridad con Cuba en Puerto Rico, se refirió a las brigadas médicas que la Mayor de las Antillas ha enviado a diferentes naciones para ayudarlas a enfrentar la pandemia de forma exitosa. Mientras, desde Haití, se hizo énfasis en la necesaria unidad frente a las crisis provocadas por el imperialismo en los países más pobres.
Y Cristian Rivas, representante de las Juventudes del Movimiento al Socialismo, expresó desde Bolivia que el proceso de cambio que desarrolla ese país «implica luchar por la identidad, vivir en armonía con la madre Tierra, la integración de los pueblos, la defensa de nuestros recursos naturales y un mundo sin violencia».
Por su parte, Engerly Cueva, presidenta de la Federación Venezolana de Estudiantes de Educación Media, señaló: «Los jóvenes estudiantes de Venezuela estaremos agradecidos al Comandante Fidel porque fue quien abrió las puertas para hacer realidad un sueño que antes creíamos posible y que hoy es realidad: la educación».
Tras la visualización del material Fidel, Cuba, África y Medio Oriente —en el que varias personalidades de esa región expresaron la importancia de los vínculos históricos y actuales con la Mayor de las Antillas— , los participantes se pronunciaron por la búsqueda de alianzas para un futuro mejor y el posicionamiento en redes sociales sobre las causas justas que defienden.
Varias intervenciones se refirieron a la importancia de la unidad entre nuestros pueblos. Elizabeth Mofu, representante del Foro campesino de Zimbabue, alzó su voz en nombre de las mujeres africanas en su lucha por la igualdad.
Entretanto, Taleb Alisalem, miembro de la Unión Juvenil Saharaui, hizo un llamado a todos los países, partidos políticos y organizaciones juveniles de todo el mundo para apoyar la lucha del pueblo saharaui en esta nueva etapa de su historia.
En sentido general, los participantes condenaron el bloqueo económico estadounidense y la aplicación de la Ley Helms-Burton, como parte de la escalada agresiva del Gobierno de Estados Unidos hacia Cuba, la necesidad del trabajo ideológico cultural y el fortalecimiento de la unidad en la diversidad.
«Tengo la convicción de que este Encuentro producirá importantes propuestas y acciones contando con la fuerza de la juventud, su creatividad, su alegría y su voluntad de convertir nuestros sueños en realidad para toda la humanidad. Siempre contarán con el apoyo del Foro de Sao Paulo en esa tarea. Estamos hermanados en esa lucha.
«Ante los desafíos complejos que vive la humanidad nunca fue tan importante construir salidas. Es necesario levantar las banderas de la unidad y la diversidad con el fin de encontrar caminos para recuperar y atender el desarrollo económico con justicia social, recuperar la plena soberanía de nuestros países y pueblos, derrotar al imperialismo y al neoliberalismo». (Mónica Valente, secretaria ejecutiva del Foro de Sao Paulo)
«Este Encuentro deviene escenario para que la juventud progresista de Cuba consolide la unidad y la solidaridad con la juventud progresista del mundo, en particular con la de África Subsahariana. La cita debe proponer soluciones a los desafíos mundiales y articular la lucha contra el imperialismo.
«Fue bajo el sabio y capaz liderazgo de Fidel, que el pueblo cubano brindó sus esfuerzos políticos y diplomáticos para apoyar la lucha de los pueblos y países en desarrollo, de tal forma y magnitud que nunca se podrá compensar. Las generaciones futuras de africanos progresistas y los amantes de la paz en el mundo, deberán por siempre respaldar el pedido de solidaridad y respetar el derecho de Cuba a la autodeterminación y soberanía». (Sam Nujoma, padre fundador de la República de Namibia)
