El Gobierno ha anticipado el plan de restricciones que debatirá este miércoles en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud para establecer una estrategia común de cara a estas navidades. Pero las comunidades autónomas han comenzado a negociar también entre ellas para que los estudiantes regresen a casa con seguridad.
Hay que recordar que uno de los puntos destacados del plan del Ministerio de Sanidad recomienda a los estudiantes universitarios que regresan a casa para las vacaciones “que limiten las interacciones sociales los días anteriores de su regreso a casa y que extremen las medidas de prevención”.
“Una vez en casa, deben tratar de limitar los contactos, interactuar sobre todo al aire libre en lugar de en el interior y usar mascarillas”, especifica el documento.
Fuentes de varias autonomías explican a Confidencial Digital que esta “delicada operación” afecta a casi un millón de estudiantes españoles, según datos del Ministerio de Universidades, que deberán cruzar el país en autobús, en tren o en coche, o trasladarse a los aeropuertos en plena pandemia para poder volver a casa.
Se producirá un desplazamiento masivo que el Gobierno y las comunidades autónomas coinciden en definir como de “alto riesgo”.
Por lo tanto, el objetivo es que los estudiantes que se encuentren fuera de su lugar de origen puedan regresar a casa por Navidad “en condiciones de seguridad” para pasar las fiestas junto a sus familias, aunque para entonces sigan vigentes las restricciones a la movilidad.
“Vamos a facilitar volver a los universitarios a los que les pille fuera por estudios con los correspondientes controles”, reconocen en varias autonomías consultadas por ECD que han comenzado a intercambiar información entre ellas para que los jóvenes se realicen un test en origen, que la mayoría de comunidades están dispuestas a financiar.
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican que algunas comunidades y universidades están organizando espacios en sus recintos poder realizar las pruebas de coronavirus. Se tratará, en la mayoría de los casos, de test de antígenos y PCR.
El planteamiento inicial es que no sean obligatorios pero sí recomendarán que se los realicen todos los estudiantes. El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas están trabajando de forma coordinada para garantizar el éxito de la operación.
Pero cada gobierno regional organizará su propio sistema de testeo. Algunos se proponen realizar pruebas al máximo número de estudiantes, otros buscan priorizar sobre todo a aquellos que procedan de zonas con mayor incidencia del virus.
En algunos campus, no se descarta incluso construir instalaciones para llevar a cabo los test pocos días antes de que empiece el regreso a casa de los estudiantes para las vacaciones.
La decisión de permitir el movimiento masivo de estudiantes es considerada una operación compleja por las autoridades sanitarias porque, desde el comienzo del curso, se ha identificado a los universitarios como un colectivo de alto riesgo de contagio.
Así las cosas, otro de los protocolos que las autonomías tienen encima de la mesa busca evitar que toda la población viaje en las mismas fechas navideñas.
Según las fuentes consultadas por ECD, varias comunidades han planteado ya a las instituciones académicas cambiar la fecha en que finaliza el periodo lectivo antes de vacaciones (o al menos las clases presenciales) para que los universitarios tengan más margen para realizar los viajes hacia sus lugares de residencia, en caso de que tengan que optar por el transporte público.
El objetivo es que el éxodo sea escalonado para minimizar las posibilidades de contagio. Se espera, no obstante, que muchos de estos estudiantes se organicen ellos solos y viajen con sus propios coches o sean recogidos por familiares para evitar mayores riesgos.