Ya no puede haber más prórrogas, ni extensiones, ni aplazamientos, ni últimas oportunidades. Queda una semana para la próxima cumbre de líderes de los Veintisiete en el Consejo Europeo, y Reino Unido necesita tener cerrado para entonces el borrador del acuerdo comercial que regule las relaciones entre ambos una vez el Brexit se haga oficial el próximo 1 de enero. Y nadie está seguro de que se puedan resolver los problemas pendientes en ese tiempo.