En este verano tan extraño, la música está jugando un papel muy especial. Y no hay nada como las melodías clásicas, las que nos resultan muy familiares, para recordar los buenos tiempos y olvidar por unos instantes la dichosa pandemia del coronavirus. En los Veranos de la Villa lo saben muy bien y por eso no han querido que este año falte la zarzuela, el género lírico español por antonomasia, que brillará con dos espectáculos que se podrán disfrutar desde hoy hasta el domingo: «La corte de Faraón» y «El estudiante y la zarzuela», ambos en el centro cultural Conde Duque.
Esta mini temporada de zarzuela se abre esta noche a las 21.30 horas con «La corte de Faraón», de Guillermo Perrín y Miguel de Palacios. Se trata de una famosa opereta picante del género sicalíptico en un acto y cinco cuadros que en 2020 llega a los 110 años. Desde su estreno en 1910 no ha dejado de subirse al escenario, algunas veces de manera oculta debido a la censura por su alta carga erótica e irreverente.
Veranos de la Villa ofrece la versión de El Negrito Producciones con Belinda Washington y Paco Arrojo como protagonistas, en una obra estrenada en la edición de 2019 del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, y que gira hacia el musical y la revista bajo la dirección de Ricardo Reguant y con coreografías de Cuca Pont.
Para los amantes del género que quieren disfrutar de las piezas más famosas, así como para quienes se inician en él y desean conocerlo, mañana llega al escenario «El estudiante y la zarzuela». Es un espectáculo en el que el alumno, interpretado por el pianista Miguel Huertas, debe hacer un trabajo de fin de curso y frente a su pregunta «¿Qué es la zarzuela?» la soprano Ruth Terán y el barítono Manuel Lanza hacen un recorrido por los grandes hits de Pérez Soriano, Moreno Torroba, Asenjo Barbieri y Sorozábal, entre otros, en medio de la trama paralela que viven en escena los protagonistas.
Los temas clásicos de la zarzuela como las maldiciones, enredos amorosos, diferencias sociopolíticas, verbenas al lado del Manzanares y también historias y emociones muy actuales están en esta producción de Raquel Acinas en la que los protagonistas desgranan la historia del género y, por ende, de la ciudad, que ha sido cuna y motivo de inspiración de muchas de sus obras desde el siglo XVII.
Ambos espectáculos cuentan con medidas de accesibilidad como bucle magnético, sonido amplificado y localidades para personas con movilidad reducida. «La corte de Faraón» contará además con dos pases con sobretitulado, audiodescripción y paseo escénico (días 22 y 23) para personas con discapacidad intelectual y visual, que se ofrecerá 75 minutos antes de la función. El aforo será limitado por orden de llegada, con un máximo de veinte personas.
Para niños
La semana pasada, la banda de música infantil Petit Pop tuvo que suspender su actuación en Veranos de la Villa por un chaparrón, pero tendrá una segunda oportunidad el próximo martes, con un concierto participativo en el que el público tendrá que implicarse para que se vaya desarrollando. Mar, Lara, Cova y Pedro llevan desde 2010 creando canciones de calidad para los más pequeños, con letras profundas y melodías asumibles por el oído adulto. «Vámonos en bici» y «Espabila», entre otras, son canciones en las que el sentido del humor y los guiños a la vida diaria son el marco perfecto para explorar el mundo a través del universo infantil.
También disfrutarán de «ATLAS, map of moves», del coreógrafo Dani Pannullo. Ofrece un juego de contrastes entre la energía de un cuerpo de atletas bailarines y la belleza de las imágenes del fotógrafo José Ortiz-Echagüe, con una coreografía cercana a la acrobacia que combina elementos del «work out free-style» con la técnica del parkour, el «b-boyin»« y la lucha grecorromana (26 y 27 de agosto a las 21 horas).