Esta semana, Iker Jiménez sufrió en primera persona los estragos del coronavirus cuando un conocido suyo de 50 años, sin patologías previas, fallecía por el Covid. Ante esto, el popular presentador publicó en sus redes sociales un texto en el que pedía que se tomaran en serio la pandemia y criticaba a todos aquellos que difunden inventos como la «plandemia», una absurda teoría que dice que el virus no existe. Un texto por el que recibió multitud de ataques por parte de esos conspiranoicos, que lo acusaron de «traidor».
«No soy un traidor, no estoy a favor de Soros, Bildelberg ni la Masonería. Pero eso solo puede entenderlo el que ha visto mis programas y mi forma de ser durante 15 años», presumió el presentador. «He sufrido amenazas, descalificaciones, ataques estos meses. De todo tipo de tendencias políticas. Sin duda, y para mi sorpresa, los más incisivos han sido los favorables a la Trama de la Plandemia. He intentado escuchar y atender argumentos pero compruebo que están enraizadas toda una serie de ideas que no van a dejar de estar. Así debe ser. Siento mucha lástima porque solo pretendo ayudar. Lo saben bien mis amigos y compañeros que están a favor de esas teorías. Y siguen siendo mis amigos. Señores, piensen...», continuó Iker Jiménez.
Pero ni el sincero texto ablandó a uno de los más furibundos críticos contra Jiménez, el tuitero Antonio Maestre, colaborador de La Sexta, que acusó a Iker Jimenez de haber dado alas a todas estas teorías conspiranoicas que ahora se le vuelven en contra. «Es una pena que Iker Jiménez haya tenido que probar en carne propia lo que pasa cuando se alimentan ciertos discursos de extrema derecha. Lo siento de veras», escribió Maestre en su perfil de Twitter. «En este mensaje reconoce que ha alimentado muchas de las conspiraciones fascistas buscando la aprobación de los mismos», continuó Maestre en otro tuit.
Enfrentamiento habitual
Íker Jiménez
Los tuits cruzados entre Jiménez y Maestre han sido habituales en los últimos meses durante la crisis del coronavirus. De hecho, todo comenzó con un artículo del tertuliano de izquierdas contra Jiménez, al que el presentador del misterio respondió con firmeza: «Ahora lo cool en redes es poner un chiste de Jaigar que fue humor como si nos lo hubiésemos tomado en serio, o que anticipamos el fin del mundo con un programa que fue para decir todo lo contrario. O lo del reloj que acierta dos veces. Info espontánea [...] Es genial como se les ocurre a todos exactamente lo mismo. Son como las espontáneos slogans impresos en las pancartas. Eso sí que es un misterio. Sin saber lo que se dijo. Ni idea. Pero a ver si cuela. A ver si los que pasan la info, los genios, se lo curran un poco más», apuntaba irónico Jiménez.
Tras una de las polémicas, en la que Maestre acusaba a Jiménez de invitar a tertulianos fascistas a su programa de Youtube «La estirpe de los libres», el presentador quiso rebajar el tono: «Por lo que parece es un programa de ultraizquierda y de ultraderecha a la vez. Fascinante», respondió ante las críticas que recibía de uno y otro «bando».
Contra la conspiración
Todo después de que este jueves Iker Jiménez lanzara un alegato contra la conspiración del Coronavirus: «Queda en mi conciencia, como desde el minuto 1 del inicio de esta plandemia, mi intento de hacer entender. [...] He investigado a fondo y muchas de las cosas que se argumentan en algunos libros y redes sociales son un ejemplo de manipulación brutal. Pero alguna gente las cree. No hay posible solución. Algo he debido hacer mal yo durante muchos años. Lo primero para que no se me crea. Para que se piense que soy traidor. Lo segundo para no saber como hacer entender que esto no es broma y que por desgracia la pandemia es real y bastante incontrolable. Está en juego nuestro futuro a corto plazo. El de nuestros hijos. Yo solo puedo informar de lo que sé. No soy judío, no soy masón, no pertenezco a ninguna sociedad secreta u oculta. Soy consciente de que he estado en los medios porque he sido "el del misterio" y seguro que no he sufrido determinadas presiones. He tocado Alcasser, pederastia de las élites, Marxismo cultural, Síndrome Tóxico, Kalergi, Bohemian Group, Bildelber... todo lo que se considera intocable. Ahí están los programas. Y mis comentarios. Y mis ideas. Algo he debido hacer mal para que me consideren pagado, traidor, esparcidor del miedo.», lamentó.
Porque al final, la realidad es el golpe definitivo de la verdad contra la conspiración: «Y ayer las corroboré. He perdido amigos y seres queridos. Esto no es una broma. Yo solo puedo informar de lo que sé. Y seguiré haciéndolo. A pesar de las amenazas, los insultos o las campañas. Va en mi conciencia. Les deseo a todos Salud», sentenció el presentador.
