Todavía queda mucho camino hasta encontrar una vacuna o tratamiento que frene la expansión del nuevo coronavirus, SARS-CoV-2, declaró ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS). Lo importante para impedir la propagación del virus es controlar la transmisión comunitaria ya que, sin inmunidad de grupo, el riesgo de contagio es muy alto.
Michael Ryan, director ejecutivo de la OMS y jefe del programa de emergencias sanitarias, señaló que «actualmente numerosos países están luchando para mantener los contagios, dentro de las comunidades, bajo control. Controlarlo es fundamental para evitar la sobrecarga de los hospitales».
«Hay que eliminar los focos de infección», puntualizó. La OMS afirma que el virus está aquí y tenemos que eliminarlo ahora con las herramientas que poseemos porque, a corto plazo, la vacuna no se conseguirá. El organismo sanitario reconoció que las medidas preventivas están disminuyendo entre la población y que, tras el confinamiento, la gente ha adoptado comportamientos que favorecen la propagación.
«Siete meses después de la declaración de emergencia de salud pública internacional sabemos muy bien cuáles son las medidas que tenemos que tomar para frenar la expansión del virus. Sin embargo, no conseguimos implementarlas», declaró la directora de la unidad de zoonosis y enfermedades emergentes de la OMS, Maria Van Kerkhove.
