Otros también, pero son muy miedosos.
Yo reconozco que López-Gatell tiene una formación médica de excepción, pues estuvo en la mejor universidad en el área de salud pública, que es Johns Hopkins. Dice las cosas con realismo y método, aunque a veces quiere quedar bien con su jefe, el cual es un gran comunicador.
Algunos miembros del gabinete son capaces y tienen método, como Alfonso Romo, Bartlett y Herrera, pero no les hace mucho caso y hay otros que tienen capacidad, pero tienen miedo de decirle al Presidente lo que piensan, porque están ligados a la sensación de poder, que da estar en el gabinete. No contradicen ni llevan a cabo el proceso analítico, sintético y contradictorio que nos enseñó Hegel, que busca y encuentra la verdad, no a través de la unidad, sino de las diferencias.
Y hay quienes no tienen capacidad para lo que fueron designados, con base en la amistad o a compromisos. Esos deberían renunciar, dando paso a un gabinete con metodología científica, que enfrente al Presidente con la realidad y deje atrás las actitudes emocionales.
Descartes: Pienso, luego existo… Para llegar a la verdad se requiere la antítesis contradictoria.
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