Un pitbull que se ‘apoderó’ no solamente del vehículo de unos jóvenes, sino también de sus corazones. Conoce esta hermosa historia
Esta historia se ha hecho viral en Facebook y es que un perro pitbull sin hogar deambulando por todos los lugares encontró una manera muy peculiar para instalarse el mismo en el auto de unos jóvenes.
Lo que ellos menos imaginaban es que el perro se ‘apoderaría’ no solo de su coche, sino también de sus corazones y de sus vidas.
Como ellos mismos lo contaron Emily y Garrett, dos jóvenes estadounidenses que compartieron la historia a través de Facebook, y ellos cuentan que todo ocurrió cuando ambos salían de una clase de yoga, y durante un descuido notaron que el perro se las había ingeniado para ingresar a su auto ubicándose en la parte inferior del asiento del copiloto.
Tras mirarlo de cerca, notaron que el perro, quien ademas se mostró muy apacible en todo momento, lucía hambriento y sediento, por lo que decidieron brindarle alimento, los minutos transcurrían mientras en can comía presuroso y cuando se ganaron su confianza , lo llevaron a su casa . Conversando ellos acerca del can decidieron que al siguiente día lo llevarían al veterinario para saber en qué condiciones se encontraba .
Algunas horas después, ya con los exámenes médicos realizados, los jóvenes se percataron de que el pitbull no solamente había llegado a ‘adueñarse’ de su auto, sino también de su corazón. El haber estado deambulando en la calle buscando a alguien dispuesto a ofrecerle cariño los conmovió mucho, lo que los llevó a ‘adoptarlo’ poniéndole el nombre Buddy.
Tres semanas después de que se convirtieran en 'padres', de este hermoso can , la pareja pasó por el que sería uno de los sustos más grandes de su vida. Durante un paseo, el can se perdió persiguiendo a un ave, lo que movilizó inmediatamente a Emily, quien se dirigió a todos los refugios en el área poniendo la alerta de su desaparición.
Luego de algunas horas, el perro pudo ser hallado sano y salvo. Su reacción de Buddy al reunirse con sus ‘padres’ fue simplemente emotiva moviendoles la cola y lamiendo la cara de sus dueños.
Buddy volvió a su hogar poco después, en donde vive feliz junto a su familia. Ellos dijeron estar dispuestos a brindarle todo el amor que el perro había estado buscando incansablemente en las calles.
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