«Klaus» es una pequeña joya que competirá en el mayor escaparate mundial del cine, los Oscar, pero su paso por las salas españolas fue testimonial. Apenas 318 espectadores pagaron su entrada para ver en pantalla grande la cinta de Sergio Pablos, que terminó con una recaudación de 1.873 euros, según datos del Ministerio de Cultura.
Ese desangelado estreno en los cines es consecuencia directa de la política de Netflix. «Klaus», producida por la plataforma junto con Atresmedia, ya se podía ver en «streaming» apenas ocho días después de su lanzamiento comercial en salas. El día 8 de noviembre llegaba a algunos cines seleccionados de manos de Tripictures y el 15 ya estaba disponible para los abonados de la plataforma.
Pero Netflix también es responsable –además de la innegable calidad del filme– de que haya logrado una nominación a mejor película de animación. La cinta de Sergio Pablos se ha beneficiado de una portentosa campaña de promoción en Hollywood de la plataforma, que ha buscado colar uno de sus títulos para competir con los grandes estudios de animación. Así, la cinta española estará en la gala del 9 de febrero buscando dar la sorpresa frente a «Toy Story 4» (Pixar), «Cómo entrenar a tu dragón 3» (DreamWorks), «Mr. Link. El origen perdido» (de Laika, ganadora del Globo de oro) y la francesa «¿Dónde está mi cuerpo?».
Aunque Netflix no da nunca datos –excepto cuando le interesa– de las reproducciones de sus contenidos, parece evidente por la promoción internacional que «Klaus» ha tenido una buena distribución en los mercados en los que opera la plataforma. Así que tanto el madrileño Sergio Pablos como los productores no pueden estar más que contentos con el recorrido de su película.
Ayer, al anunciarse que «Klaus» es una de las cinco candidatas a ganar el Oscar a mejor película de animación, el director contaba a EFE que la nominación era «un gran honor» y que se sentía «abrumado».
Conocido por ser uno de los creadores de la franquicia de «Gru: mi villano favorito», Pablos ha expresado su agradecimiento a la Academia de Hollywood, a Atresmedia «por haber dado el primer impulso al proyecto» y a Netflix por su «apoyo incondicional especialmente cuando no se trataba en absoluto de una apuesta segura, sino de un primer largometraje de una pequeña empresa española con un director debutante», recoge Efe.
Se trata de la primera película de animación familiar de Netflix, una coproducción entre Spa Studios y Atresmedia que cuenta la historia de los orígenes de Santa Claus. El reparto de voces de la versión original está formado por los actores Jason Schwartzman, Rashida Jones, J.K. Simmons y Joan Cusack. Para la versión en español, ponen voz a los protagonistas los actores Quim Gutiérrez, Belén Cuesta y Luis Tosar.