<p>Existe el pensamiento extendido de que, para emprender, debe surgir una idea en la cabeza del emprendedor que cuaje y quede instalada en su cabeza, impidiéndole pensar en otra cosa. Si bien es cierto que la mayoría de los emprendedores en España lo son como respuesta a una oportunidad que identifican en el mercado, la realidad es que también existen los que lo hacen motivados exclusivamente por la necesidad. </p>