Para todos aquellos que alguna vez vivieron estas fechas intoxicados o presa de los excesos, y que ahora están recuperados de su adicción o simplemente decidieron pasar estas fechas de una manera diferente, el común denominador ha sido el de un nuevo amanecer en la Navidad que se celebró ayer. Despertar sin culpas, sin lagunas mentales, recordando todo lo qué pasó en la Nochebuena, estar sin cruda física o moral, pasar un día en paz, disfrutar de la familia y sentirse bien en general, son algunos de los muchos beneficios que han vivido quienes se unieron al maratón Lupe-Reyes en abstinencia y todos aquellos que eligieron dejar de consumir su sustancia de preferencia en estas fiestas.
Ya sea que esté usted viviendo su primera temporada navideña en abstinencia o sean ya más de dos, como lo refieren muchos de mis consultantes, los beneficios son múltiples y bien vale el sacrificio de estarle diciendo que no al primer consumo, por un día a la vez.
¿Hace cuánto tiempo que no amanecía usted sin dolor de cabeza, sin malestares estomacales, sin ansiedad o deseo de seguir consumiendo? Quienes han experimentado los beneficios de la abstinencia y han podido darle un nuevo significado a estas fechas, son unos triunfadores.
Independientemente de si usted tiene varios años en sobriedad, si este año fue su primera Navidad después de varios meses de tratamiento o fue de los valientes que iniciaron este desafío de abstinencia apenas unas semanas o días antes de la temporada de los excesos, lo felicito por los grandes pasos en su nueva forma de vida.
Si es de los que están haciendo apenas un proceso de investigación y desintoxicación para saber que tan grave es su posible problema de adicción, quizás haya sido capaz de ver los pequeños grandes beneficios y haya valido la pena su buena voluntad para lograrlo.
Cómo se dice coloquialmente, ¿se ven diferente los toros desde la barrera? Además de los inmediatos beneficios personales en este nuevo amanecer, quizás le haya tocado observar cómo quienes si están consumiendo se van intoxicando, comienzan a transformarse e incluso a terminar mal, por lo que usted podría estarse reflejando o pensando: “podría ser yo”.
Ahora siguen las pruebas pues pasada la Navidad llegan los famosos brindis de fin de año, las despedidas y los pretextos para seguir consumiendo. Si vio las mieles de un amanecer diferente y desea seguir disfrutando, hágalo simple y tan solo sígase planteando las próximas 24 horas sin consumir y espero sea de los que lleguen invictos en abstinencia hasta el 2020.
Recuerde estos pequeños tips: diga no al primer consumo, diga no a la primera invitación, diga cualquier pretexto para justificar su abstinencia por el día en turno, hágase rodear de una red de apoyo, recuerde los beneficios que está viviendo y, sobre todo si surge la idea de ingerir su sustancia de preferencia, tenga siempre presente las consecuencias negativas que el hacerlo le ha traído a su vida.
Feliz fin de año 2019 en sobriedad y plenitud.
