La Fundación Amigó ha realizado un estudio que sentencia que los expedientes abiertos a los jóvenes por violencia contra sus progenitores aumentaron en un 3,6% durante el 2018, registrándose 4.833 menores bajo procedimiento por este tipo de delito. En el caso de las Islas Canarias,
cuarta comunidad autónoma con más expedientes, se ha situado en los 405 casos.
La violencia filio-parental son conductas reiteradas bien de violencia física, psicológica e incluso económica que han sido dirigidas de hijos a padres o tutores legales. Desde la Fundación Amigó indican que estamos ante un fenómeno que “requiere de respuestas especializadas para poder abordarlo” y conseguir que la unidad familiar pueda reconducir la situación y el vínculo afectivo. Del mismo modo, afirman que es un problema de mayor gravedad de la que los datos reflejan, pues las denuncias que se registran son de los casos más graves, que suelen ser de un 10 o un 15 por ciento del total.
La psicóloga de la fundación, Irene Gallego, advierte de la importancia que tiene un trabajo en red que aúne “pautas, formación y conocimiento sobre esta problemática” pues ve fundamental la labor de sensibilización y prevención para evitar cualquier tipo de violencia del ámbito familiar.
De una muestra de más de mil casos, se ha podido calcular que la edad media de los hijos denunciados en estos casos es de 15 años y medio, mientras la de los progenitores se sitúa en los 46 años. En cuestión de género, los niños son casi dos veces más violentos que las hijas, pues se reparten el 63% y el 37% de los casos respectivamente.
El estudio señala, además, que el 30,5% de los expedientes se dan en casos de hijos únicos, y que tres de cada cuatro de los hijos envueltos en estos procedimientos bajan su rendimiento escolar. Asimismo, se ha podido concluir que el 64% de los hijos, presentan algún tipo de adicción. Por último, revela dos datos importantes: el 16,80% de los hijos ha sufrido acoso escolar y el 40,87% ha presenciado de manera cercana algún tipo de violencia, de los cuales, en el mayor número de los casos, viene por parte de algún familiar.