“No deberían escucharme a mí antes que a otra persona. Yo soy solo una activista climática más dentro de un grupo. Necesitamos más activistas”, afirmó Greta Thunberg, a sabiendas que acapara todos los focos allá donde va. La adolescente de 16 años hizo hincapié en que los políticos “no pueden seguir ignorando ni ocultando la crisis climática. Algunas personas quieren mantener su status quo. Les da miedo el cambio por eso están tratando de silenciarnos. Están desesperados por intentar silenciarnos”.A continuación, mandó un mensaje muy conciso respecto a la importancia de que se avance en la cumbre del clima: “No podemos permitirnos un día más sin que se tomen medidas o acciones. Hay que aprovechar la oportunidad”. Y es urgente porque pese a las múltiples cumbres y compromisos, “la crisis climática se sigue obviando y no queremos seguir así. Queremos ver acciones por parte de la gente con poder. No podemos esperar más”.
Preguntada por los logros conseguidos, la joven, tras insistir en que “lo único que queremos ver es acción real”, reconoció que si bien el movimiento Friday’s for Future “ha conseguido mucho, si lo vemos desde otro ángulo, no hemos conseguid nada”, manifestó Greta en el contexto de que las emisiones han vuelto a subir y que lo único conseguido es una declaración de emergencia climática por parte del Parlamento Europeo.
No fue la única joven del movimiento. Llamó la atención lo afirmado por Alejandro Martínez, de Friday’s Internacional España: “No es relevante cómo vemos nosotros el futuro, sino cómo lo ven los científicos. Pedimos que se escuche a los expertos”.
Antes de que saliera Greta al escenario, Ángela Valenzuela, del movimiento Friday’s Chile, recordó a los presentes que “hay gente de diferentes partes del mundo levantándose” en la lucha contra el cambio climático para pedir a los políticos que actúen ya. Por eso están ellos aquí, en Madrid. “La crisis del cambio climático está aquí ahora mismo”.
Comienza el show
Al acto estaban acreditados 412 personas entre periodistas, fotógrafos y cámaras. Los cuales tuvieron que esperar en torno a media hora para acceder a La casa encendida, donde no solo llamaba la atención ver el letrero encendido de la entrada pese a ser de día, sino que después nos dividieron en tres salas. Unos periodistas extranjeros comentaban que nunca habían visto algo así, “ni con el Papa”. Arranca el show o la Prensa rosa llevada al cambio climático. Greta está en Madrid.
