Mientras unos se abrazan y celebran haber conquistado la Copa Davis, hay cientos de ojos pendientes de ellos a través de la tele que sueñan con imitarlos. Todavía no son conscientes de lo difícil que es alcanzar la cima, pero se entrenan y sienten y se apasionan igual en la pista que los mayores. Con la ilusión de quien no sabe que hay fronteras.
Será difícil mejorar a esta generación de oro con nombres de Carla Suárez, Garbiñe Muguruza, Feliciano López, Fernando Verdasco, David Ferrer, Tommy Robredo, Rafa Nadal, Pablo Andújar, Marcel Granollers, Roberto Bautista o Pablo Carreño. Pero no por eso ellos lo dejan de intentar. Y para llegar hasta esa meta que todos sueñan, los pasos se han de dar cortos, pero con las mejores condiciones posibles. Y para ello, torneos del calibre del Rafa Nadal Tour, Warriors Tour, Jóvenes Promesas, MMO sub 16 y el Valencia Tennis Tour.
Quizá no llenan las gradas ni hay rueda de prensa después de los partidos, pero niños entre 8 y 15 años disfrutan de unos torneos adaptados a su crecimiento con la mayor de las calidades profesionales. En el caso del circuito que lleva el nombre del número 1 del mundo, son competiciones en diferentes ciudades de España que reúnen a más de 2.000 niños que comparten partidos, risas y lecciones, dentro y fuera de la pista. También actúa de esta manera el MMO sub 16, con torneos etrritoriales y que confluyen en la fase final en la Caja Mágica de Madrid, en la misma semana que se celebra el Mutua Madrid Open. Y es la misma dinámica que ofrece el Valencia Tennis Tour, aunque en la Comunidad Valenciana, y que va por su tercera edición con un éxito de participación de más de 1.500 tenistas.
«Hacemos un gran trabajo con las escuelas. Informamos a los entrenadores y a los padres de que existe esta oportunidad para que los chavales puedan competir en unas condiciones muy parecidas a las de ser un profesional. El Valencia Tennis Tour tiene árbitros, están muy bien cuidados en cuanto a horarios e información de resultados, y muy buenos premios. Y más que las redes sociales, lo que está funcionando es el boca a boca. Los niños salen encantados y el que prueba repite», comentan desde la gira valenciana.
Una gira que tiene como base principal enseñar también los valores que dignifican el tenis: compromiso, respeto con el rival y los compañeros, esfuerzo para ser mejor que en el partido anterior. Porque son las claves de los tres clubes que organizan el evento, que cumple este año su tercera edición y que construye tenistas con todas sus aristas. Tanto, que también organizan reuniones con los padres. Aquí el camino se recorre en familia.
Uno de estos potenciales campeones de Grand Slam es Ignacio Parisca, arraigado ya en Valencia y con las miras puestas muy arriba porque su evolución crece conforme sopla velas. A sus 13 años ya tiene en su palmarés el subcampeonato del Valencia Tennis Tour y quiere más.
«El ganar, por supuesto, siempre está ahí, pero enseñamos que no es el único fin. Que tienen que disfrutar de jugar y de hacer amigos. No todos llegan a lo más alto, por lo que deben ser conscientes de que tienen que estudiar, afianzar una cultura y unos valores y, sobre todo, disfrutar del deporte con los demás», explicaba para este diario Ana María Parera, presidenta de la Fundación Rafa Nadal, que organiza el Rafa Nadal Tour.
No todos llegarán, pero sus sueños se construyen día a día con circuitos como estos, en los que empiezan a protagonizar proezas que otros, quizá en el futuro, vean en la tele.