“Sentimos el nivel de fallos detectados en la prueba Pisa por un organismo tan prestigioso como la OCDE, pero los resultados son un auténtico desastre, están contaminadas y tienen credibilidad baja”, ha dicho el consejero de Educación de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, que ha pedido a la OCDE que no publique y revise los resultados de las pruebas realizadas a los alumnos de 15 años en Comprensión lectora, Ciencias y Matemáticas practicadas en 2018 porque los resultados “son extraños”. Madrid cree que las conclusiones que serán presentadas el próximo día 3 de diciembre “no reflejan el nivel educativo de los alumnos madrileños”.
Una de las cuestiones que alertaron a la consejería de que existieran anomalías fueron algunas de las respuestas obtenidas a preguntas de lógica como la siguiente: “¿los aviones están construidos por perros?" La respuesta ha sido “sí” en muchas ocasiones. Con este tipo de planteamientos, que se han hecho por primera vez a los alumnos en la prueba de comprensión lectora, la que tiene más peso este año y de apariencia fácil “el alumno contesta si las frases son lógicas o no. Son afirmaciones o ítems que se miden para ver si los estudiantes son capaces de reaccionar ante la lógica. Se pretende que sean capaces de contestar al cien por cien y con correción”, expone Rocío Albert, viceconsejera de política educativa.
La consejería de Educación considera que “nos encontramos ante la punta del iceberg de un grave problema en las pruebas PISA 2018”. La OCDE ha había admitido hace unos días que la prueba de comprensión lectora estaba contaminada y no se iba a publicar este año, pero Madrid también considera que “el resultado de la competencia matemática y científica viene determinado por el resultado de la Lectura. Es decir, los obtenidos en Lectura influyen directamente en los de Matemáticas y Ciencias”. Y es que no todos los estudiantes han hecho todas las pruebas, pero obtienen notas “mediante una estimación que se hace a partir de una serie de variables entre las que figura el resultado obtenido en lectura”. Es por esto por lo que Madrid considera que el 60% de los resultados obtenidos en Ciencias y Matemáticas “están contaminadas”, con lo que “también son inverosímiles”.
A esto se suma que en los centros donde la prueba fue realizada por tres grupos de examinadores, hay tres grupos donde los errores si triplican, según la consejería. Es decir “un tercio de los examinadores obtuvieron resultados inverosímiles”. Si se eliminasen estos grupos, los resultados de la Comunidad de Madrid serían doce puntos superiores.
Para colmo, hubo alumnos que no se presentaron a la prueba y fueron calificados con un cero, “lo que bajó aún más la media de notas”.