Desde que se anunció el acuerdo entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias para formar un gobierno de coalición, el nombre de Irene Montero ha figurado en todos los posibles Consejos de Ministros que se han barajado en las últimas semanas. Al principio se le situó como ministra de Sanidad y ahora en Igualdad, pero durante muchos días también se le ‘designó’ ministra de Vivienda.
En Podemos, se justificaba ese posible ministerio para Montero reivindicando su etapa como activista anti-desahucios, apoyando las iniciativas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. No obstante, en IU vieron, desde el primer momento, un gran inconveniente en el hecho de que Montero ocupara Vivienda: “Con las críticas recibidas por la compra del chalet de Galapagar, iba a haber cientos de memes en cuestión de minutos. La hubieran llamado la ministra de Vivienda... de Galapagar”.
